Los talibán aliados a Al Qaida amenazaron ayer con asesinar al ex presidente Pervez Musharraf si regresa a Pakistán el domingo, como dijo que haría. “Hemos preparado un comando de kamikazes para Musharraf”, afirmó a la AFP Ehsanulá Ehsan, portavoz del Movimiento de los Talibán de Pakistán (TTP), en una conversación telefónica desde un lugar desconocido. El TTP es uno de los principales grupos armados islamistas, responsables de una oleada de atentados sin precedente, que causaron casi 6000 muertos en Pakistán en unos seis años.

El ex general, que se hizo con el poder en 1999 a raíz de un golpe de Estado y se vio obligado a dimitir en 2008 después de que su partido perdiera las legislativas, vive desde hace cuatro años entre Londres y Dubai y se presenta como una “alternativa” para las próximas elecciones generales de mayo.

Musharraf ya sobrevivió, cuando era presidente, a dos atentados de grupos fundamentalistas musulmanes, que desde 2001 reprochan a los diferentes gobiernos y a las todopoderosas fuerzas armadas el haberse aliado con Washington en su “guerra contra el terrorismo”. El ex presidente paquistaní, de 69 años, es hijo de diplomáticos y en su juventud vivió en Turquía. Su regreso al país representa todo un desafío para el gobierno de Asif Ali Zardari, viudo de la ex primer ministra Benazir Bhutto, rival histórica de Musharraf, asesinada en 2007 durante el gobierno del ex general, en medio de una campaña electoral.

En una entrevista concedida el viernes en Dubai, Musharraf prometió regresar el domingo a su país para participar en las legislativas. “Volveré por tierra, mar y aire, aunque mi vida esté en peligro, es a lo que me comprometí por mi país”, aseguró.