EL MUNDO › POWELL DARA MAS INFORMACION LA SEMANA PROXIMA
En busca de la pistola humeante
Por Julian Borger
y Ewen MacAskill
Desde Washington y Londres
Se espera que el secretario de Estado Colin Powell revele más información de inteligencia de Estados Unidos sobre la relación Al-Qaida-Irak en una reunión del consejo de seguridad de las Naciones Unidas, que funcionarios norteamericanos esperan poder arreglar para la semana que viene. La reunión será seguida por otra evaluación sobre el acatamiento iraquí con los inspectores de armas de la ONU el 14 de febrero, posiblemente la última.
En esa reunión se espera que Powell produzca fotografías aéreas como evidencia de que Irak está ocultando su programa de armas de los inspectores de la ONU. Las fotografías mostrarán actividad en lugares sospechosos justo antes de la llegada de los inspectores y será parte de un paquete de evidencia que la Casa Blanca está en proceso de declasificar. Mientras Bush está preparando a su pueblo para la guerra, Irak amenazó ayer por primera vez de llevar la batalla contra las tropas lideradas por Estados Unidos fuera de sus propias fronteras. En un eco escalofriante de la guerra del Golfo, Tariq Aziz, el viceprimer ministro, dijo: “Si hay un ataque de las tropas de Estados Unidos desde Kuwait, no puedo decir que no responderemos”. El ministro de defensa de Kuwait, Sheik Jaber Mubarak al-Sabah, respondió inmediatamente, advirtiendo a Bagdad que “pagaría caro” si amenazaba la seguridad de su país. Saddam Hussein emitió un mensaje igualmente ominoso en una reunión de sus comandantes militares, advirtiéndoles que no contemplen la traición. De acuerdo con la prensa iraquí, el presidente está respondiendo a un comandante que planteó la posibilidad que Estados Unidos alistará la ayuda de traidores.
Bush afirmó sobre una relación entre Irak y Al-Qaida antes. En octubre, declaró que un miembro del liderazgo de Al-Qaida con experiencia en armas químicas y biológicas había recibido cuidados médicos en Bagdad durante el bombardeo de Estados Unidos a Afganistán. En ese momento, las fuentes de inteligencia de Estados Unidos, dijeron que el hombre en cuestión era Abu Musab Zarqawi, un jordano que fue tratado por una pierna herida. Creen que puede haber ayudado al experimento de la pequeña milicia musulmana Ansar al-Islam con armas químicas y biológicas en su lucha contra el movimiento kurdo anti-Saddam, PUK, en el norte de Irak. EE.UU. tambíen cree que Zarqawi estaba detrás del asesinato de su diplomático Laurence Foley en Amman.
De The Guardian de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Celita Doyhambéhère.