La ONU pidió reunir 160 millones de dólares para asistir a un millón de civiles que huyeron o huirán en breve de la violencia en Libia o se quedarán en el país, al tiempo que advirtió que los libios podrían sumarse al éxodo en “grandes números” y causar una crisis de refugiados. La Oficina de Asuntos Humanitarios de ONU dijo que el dinero cubrirá tres meses de alojamiento, comida, agua, transporte y sanidad para 200.000 personas que ya dejaron Libia, 200.000 más que se espera lo hagan en los próximos días y 600.000 que, según se proyecta, necesitarán asistencia dentro del país norafricano. La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) dijo que 203.756 personas, en su mayoría trabajadores extranjeros, dejaron el país, comparados con los 191.000 reportados el 3 y 4 de marzo pasados. El jefe de la OIM, William Lacy Swing, advirtió que grandes cantidades de personas, sobre todo de origen asiático y muchas de ellas varadas en rudimentarios campamentos en la frontera con Túnez, aún necesitan ser evacuados de Libia, y que la crisis podría volverse todavía más grave.