EL MUNDO
Un informe irónico
Estados Unidos divulgó ayer su informe anual sobre los esfuerzos de Washington por mejorar los derechos humanos en el mundo, y destacó su trabajo en Irak, a pesar de hacer un mea culpa por el creciente escándalo sobre torturas a prisioneros iraquíes. Funcionarios norteamericanos dejaron trascender que la publicación del informe había sido postergada porque “haría que nos viéramos hipócritas”. El contexto del escándalo por los casos de torturas a prisioneros en Irak y Afganistán no era “el apropiado para transmitir el mensaje”, admitió ayer el secretario adjunto de Estado, Lorne Craner. El informe no menciona esos abusos, pero identifica programas impuestos para superar el historial “extremadamente pobre” de derechos humanos bajo el régimen de Saddam Hussein. Las acusaciones contenidas en el informe contra numerosos países (entre ellos Cuba, Colombia, Haití) son llamativamente similares a las incriminaciones que se hicieron desde todo el mundo contra Estados Unidos por los maltratos a los presos iraquíes. El informe también critica a países que restringen la libertad de prensa, una práctica utilizada por el régimen de ocupación que lidera Estados Unidos en Irak, donde clausuró periódicos locales y limitó la actividad de la cadena televisiva árabe Al Jazeera.