El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, cree que se debe hacer un “último gran esfuerzo” para ganar la guerra en Irak y para ello considera enviar otros 20 mil soldados a ese país en 2007, según informó ayer el diario británico The Guardian. Esta opción, que Bush comentó a sus consejeros más cercanos, estaría en línea con las políticas que lleva a cabo el Grupo de Estudio por Irak (ISG), dirigido por el ex secretario de Estado norteamericano James Baker. Si bien el trabajo del grupo –desarrollado por funcionarios del Pentágono– aún no finalizó, la estrategia, junto a otras propuestas sobre el tema, comenzó a circular como borrador y fue discutida en sesiones privadas por Baker y el vicepresidente norteamericano Dick Cheney.