Después de enumerar sus principales propuestas programáticas desde arriba del escenario montado frente al Obelisco, Fernando “Pino” Solanas soltó la frase que los militantes y simpatizantes de Proyecto Sur esperaban escuchar de boca del primer candidato a diputado nacional: “Nos posicionamos como la segunda fuerza política en la Capital”. La confirmación –que prenuncian las encuestas– desató la algarabía en la Plaza de la República. Pero Solanas también advirtió desde la tribuna sobre la “campaña sucia” que se desató sobre su candidatura, descartó un acuerdo legislativo con el Gobierno y aclaró que “vamos a apoyar en el Congreso todas las iniciativas que sean un avance, un beneficio para la Nación, para la democracia y para su pueblo, vengan del Gobierno o de la oposición, sin mezquindad alguna”.

Solanas también salió al cruce, primero frente a los periodistas y luego ante sus simpatizantes, del diario La Nación, que tituló “un acuerdo legislativo de Solanas con el Gobierno” por su respaldo al proyecto de ley de servicios audiovisuales. “No hemos pactado con nadie”, sostuvo el candidato y reiteró que “Proyecto Sur apoyará con honestidad política e intelectual cualquier proyecto, del oficialismo o de la oposición, que beneficie a la Nación y a su gente”.

Luego desató sus críticas a la gestión del Gobierno y aseguró que un mayor equilibrio parlamentario, que arrojaría la elección del domingo, “puede ayudar a poner en caja esa enemiga grande de la política argentina que es la soberbia”. También embistió contra el macrismo por su política educativa y sanitaria y volvió a calificar a Macri como uno de “los herederos del menemismo”. Y aseguró que la postura del empresario Francisco de Narváez a favor de la reestatización de empresas privatizadas es “un manotazo de último momento, oportunista y demagógico”.

Cuando lo consultaron sobre las críticas que Elisa Carrió había realizado sobre su pasado, Solanas dijo que “las declaraciones de Carrió forman parte del folklore grotesco de la política argentina”, se las adjudicó al “nerviosismo”, por los resultados del domingo, pero no pudo evitar contestarle: “Hace 20 años, desde el llano, yo empecé a oponerme a las privatizaciones y en especial la de YPF. Siempre defendí, en la Cámara de Diputados, el tema petrolero y energético. Habría que recordarle a la doctora Carrió, que en el 2007 llevó de senadora a la hija de José Estenssoro, María Eugenia, que sigue defendiendo las ideas de su padre, que fue el descuartizador de YPF al inicio de la gestión Menem”.

Por la mañana, la Policía Federal impidió que los militantes de Proyecto Sur instalaran una carpa frente al Obelisco porque “no tenía autorización” del gobierno porteño. Los simpatizantes de Pino le pusieron calor a la fría jornada con música en vivo, con rock and roll, ritmos murgueros, melódicos y hasta tango, que llevó a la diputada María América González a bailar frente a todos “Tinta Roja” con un jubilado.

A las siete de la tarde, Solanas fue recibido con fuegos artificiales y subía al escenario que tenía como telón de fondo el viejo logo de YPF con la consigna “luche y vuelve” y se paró junto al resto de los candidatos y dirigentes de Proyecto Sur (entre los que se encontraban Fabio Basteiro, Delia Bisutti, Claudio Lozano y Eduardo Macaluse). Al mismo tiempo, los soldados del Regimiento de Patricios –guardia de honor del jefe de Gobierno porteño– arriaban la Bandera Argentina del mástil de la Plaza de la República.