EL PAíS › PINTADAS Y ATAQUE A BALAZOS A LA CASA DE UNA MILITANTE DEL TERESA VIVE
Mujeres bajo amenazas en Merlo
Tres militantes del MST fueron agredidas: recibieron amenazas, hubo pintadas en su contra y disparos de madrugada. Realizaban un censo de desocupados en un barrio con historia de aprietes violentos.
Por L.V.
El Movimiento Sin Trabajo Teresa Vive (MST) de Merlo denunció que tres militantes barriales fueron hostigadas con disparos al aire y pintadas difamatorias por una patota que vincularon con el intendente del PJ, Raúl Othacehé. Las agredidas son mujeres que se acaban de incorporar a la organización de desocupados. Los aprietes ocurrieron en la madrugada del sábado, cuando un automóvil pasó frente a la casa de Norma Olivera y realizó, a las tres de la mañana, varios disparos al aire. Norma, que viene de trabajar con el peronismo, había recibido días antes amenazas de una puntera del PJ por “haberse cambiado de vereda”. Durante la misma noche, un grupo pintó las paredes del barrio donde viven otras dos desocupadas con frases que las acusan de “estafadoras” y “ladronas de planes”. Ambas estaban realizado un censo de los desocupados del asentamiento.
El Teresa Vive es una organización piquetera integrante del Movimiento al Socialismo. En Merlo empezaron a trabajar en septiembre, cuando iniciaron un relevamiento de los vecinos que no tienen trabajo y abrieron tres comedores populares. Susana Barbalece decidió sumarse a esas tareas hace 15 días. Está desocupada hace ocho años, tiene tres hijos y con su marido mantienen a la familia con los ingresos que les da una gomería. El sábado a la mañana, encontró que habían pintado todo el vecindario con su nombre y apellido seguido de acusaciones como “estafadora dejá de robar” y “no te quedés con la plata de lo planes”. Otra de sus compañeras fue objeto de la misma campaña.
La mujer no se había recuperado de la sorpresa cuando su esposo llegó con la noticia de que habían tratado de robar su gomería. “Y por la tarde nos filmaron desde una moto”, agregó la denunciante.
Los piqueteros realizarán a las once de la mañana una marcha de repudio a la sede de la Municipalidad y ofrecerán allí una conferencia de prensa. Están especialmente preocupados por la aparición en el distrito de volantes que, con el escudo de la Municipalidad, alertan sobre “especuladores que estafan a la gente invocando el Plan Trabajar”. El panfleto alude, por supuesto, al trabajo del MST para organizar la demanda de los desempleados.
De enero a hoy, en Merlo hubo una serie de graves episodios de violencia contra los militantes sociales.
El 22 de febrero, doscientos barrabravas y empleados municipales atacaron con palos y cadenas a los caceroleros locales. El 5 de marzo la casa de Gladys Quinteros, habitual oradora de la asamblea, sufrió un incendio. Días después la policía se llevó presos a cuatro vecinos que participaban de la asamblea en la plaza, con la excusa de que no tenían sus documentos de identidad encima. Finalmente aparecieron unos volantes firmados por las “agrupaciones peronistas de Merlo” que definían a los participantes de la asamblea como “marxistas y comunistas fracasados”.
El hostigamiento a los militantes nuevos, con poca experiencia, es un fenómeno que se viene denunciando de manera reiterada en los últimos meses a lo largo del conurbano. Las presiones incluyen seguimientos, autos desde donde se fotografía a la gente, amenazas telefónicas e incluso secuestros. Los dirigentes barriales del MST responsabilizaron ayer al intendente Othacehé por los nuevos aprietes. “Queremos que nos atienda y nos dé explicaciones por lo sucedido”, sostuvo ayer Daniel Cope, de esa organización. El referente también anticipó que tras la movilización que realizarán al mediodía llevarán el caso a la Justicia para dejar asentada la denuncia como antecedente.