EL PAíS › SOLO UN 24 POR CIENTO CREE EN EL FUTURO HIJO DE MENEM-BOLOCCO
En Chile huelen un embarazo electoral
La absoluta mayoría de los diarios chilenos mostró ayer sus dudas sobre la utilidad del anunciado embarazo de Cecilia Bolocco. “La Segunda” realizó un sondeo on line y el 76 por ciento dijo que “es una farsa”.
La encuesta es contundente. Sólo el 24 por ciento cree que el anunciado embarazo de Cecilia Bolocco es verdadero. Y en cambio el 76 por ciento sostiene que es una farsa y que se trata de una movida para mejorar las chances de Carlos Menem en las elecciones presidenciales. El resultado no sería tan novedoso en la Argentina, donde el grado de credibilidad de los políticos es prácticamente nulo. Pero el sondeo on line lo realizó el diario La Segunda, de Chile, donde la mujer del ex mandatario es acreedora de una gran popularidad.
Hasta el mediodía de ayer, de la encuesta participaron 1490 personas. No es casualidad la inquietud planteada por La Segunda. Prácticamente todos los diarios del país trasandino vincularon la noticia a la campaña electoral de Menem.
El Mercurio lo hace desde el mismo título. “A 11 días de las elecciones presidenciales, Carlos Menem reconoció que será padre.” El periódico incluye una consideración telefónica de su hermano Eduardo Menem. “No creo que esto pueda influir en los votantes para los próximos comicios. Los argentinos no se fijan en esas cosas.”
No es el único tramo que aviva las especulaciones sobre la incidencia de la vida privada en la pública. “La vida familiar del ex presidente ya estaba en la palestra: a comienzos de abril, el jefe de campaña peronista Carlos Souto admitió que la muerte de Carlos Menem Jr. había sido usada en un spot publicitario para obtener votos. En el aviso se veía al presidenciable caminando por una quinta, diciendo Dios me enfrentó al dolor.”
La curiosidad llevó al El Mercurio a consultar, incluso, a editores y jefes periodísticos de La Nación, Clarín y Página/12. En las respuestas de los argentinos hubo un común denominador: un gran escepticismo sobre si el anuncio del embarazo se traducirá en votos.
De eso también se ocupa La Tercera. “La decisión de que Bolocco a partir de diciembre no apareciera en público junto a su esposo se debió a que ella estaba preocupada casi exclusivamente del tratamiento para ser madre. También porque los asesores de Menem concluyeron que, en esta etapa, la presencia de la animadora no aportaba a la imagen del político”, señaló el medio chileno.
Ultimas noticias asigna al periodismo argentino las conjeturas sobre el supuesto valor agregado que traería un bebé en medio de la campaña. “Pese al revuelo ocasionado por la noticia, que incluso podría dar vuelta los resultados electorales del próximo 27 de abril en favor de Menem, según especula la prensa trasandina, el círculo más estrecho del candidato mantuvo absoluto hermetismo”, señala.
La Segunda, además de la encuesta, no deja pasar por alto las especulaciones sobre el sentido de oportunidad del anuncio. Y lo hace brindando espacio al coordinador general del Partido Justicialista, Ricardo Otero.
Consultado por las dudas que ha suscitado la noticia del embarazo que se da a conocer sólo días antes de los comicios presidenciales, programados para el 27 de abril, (Otero) dijo: “No creo que sea un argumento de campaña. Precisamente por eso, porque alguien lo puede manejar en forma equivocada, no se da a conocer una cosa tan privada en los medios” (sic).
La Segunda también se dio lugar para jugar con empresarios, políticos y animadores sobre la noticia y el nombre que le pondrían al hijo del matrimonio Menem-Bolocco.
“Es un tema irrelevante, es tan propio de la familia, salvo que alguien quiera darle connotaciones políticas al hecho de tener un hijo”, comentó Clara Szczaranski, presidente del CDE.
Más contundente fue Jorge Pizarro, senador de la DC. “¿Quién lo confirmó? ¿Menem? Esto sí que es una muy buena campaña”, destaca entre sorprendido y risueño el legislador. Y siguiendo el análisis electoral, sugiere que el nacimiento “tiene que ser donde haya más votos”. Aunque no sugiere nombres, propone “algo así como, je je je, la esperanza nunca se pierde..., eso dicen”.
En cambio, Juan Carlos Saffie, síndico de quiebras de Colo Colo, prefirió evitar nombres y ni siquiera relacionó el tema con la campaña electoral. Su preocupación era otra y así lo expresó: “¡Hay que averiguar cómo diablos lo hicieron!”.