EL PAíS › EL SENADO APOYO AL GOBIERNO EN EL PAMI CON MAYORIA CALIFICADA
“No venimos a hacer lo mismo”
El Senado le dio anoche media sanción a la ley del PAMI que le otorga al Ejecutivo la facultad de intervenir la obra social. Hoy la votará Diputados. La CGT de los Gordos ya acordó con el Gobierno el reemplazo de Petrecca y Hermoso.
Por Eduardo Tagliaferro
“No venimos para seguir haciendo lo mismo”, dijo con la afonía que la persigue desde hace varias semanas. El silencio con el que los senadores siguieron sus palabras permitía que se escucharan los ruidos que las cámaras televisivas hacían en las bandejas superiores del recinto. El vehemente y directo discurso de la santacruceña Cristina Fernández de Kirchner fue el punto más alto del debate con el que los legisladores dieron ayer su respaldo a las modificaciones a la ley del PAMI, que le otorga al Presidente de la Nación la facultad de intervenir la obra social de los jubilados. Dejó en claro que, lejos de recurrir a la salida más fácil, la firma de un decreto presidencial de necesidad y urgencia, el Gobierno buscaba que cada una de las instituciones asumiera sus responsabilidades. Fue el fin de una larga jornada en la que el proyecto oficial en ningún momento corrió el riesgo de no contar con el respaldo necesario. A la hora de la votación logró el apoyo de los dos tercios de los presentes. Hoy por la mañana se espera el voto favorable de los diputados.
No se cantó “Resistiré”, ni ninguna canción parecida. Lo cierto que los pocos nubarrones que se habían insinuado por la mañana en la reunión del bloque del PJ fueron sólo una falsa alarma. Sin apartarse de los tics conocidos, frente a sus compañeros de bancada, el catamarqueño Luis Barrionuevo había insinuado recurrir a las ya oxidadas carpetas. En su embestida contó con algunos respaldos por parte del menemismo. Aunque larga, la reunión del bloque oficialista en ningún momento se fue de tono. El respaldo que el menemismo le dio a Barrionuevo en la reunión de bancada no se lo otorgó en el recinto. Al momento de votar, el riojano Eduardo Menem no se encontraba, pero su comprovinciana, Ada Maza, levantó sus manos para acompañar el proyecto del Gobierno. Claro, a esa altura tampoco Barrionuevo se encontraba en el recinto y la resistencia que había declamado frente a los medios no pasó de la bravata.
El debate sobre el PAMI comenzó con la exposición de la titular de la Comisión de Salud, la misionera Mercedes Oviedo. Luego de defender la iniciativa gubernamental, Oviedo concluyó que la aprobación del proyecto sobre la obra social de los jubilados “es un aporte, una muestra para dar gobernabilidad a un gobierno que se inicia”. Le si-guió con el uso de la palabra el radical rionegrino Luis Falcó. Después de dejar en claro que los radicales no estaban contra el presidente Néstor Kirchner, apeló a la memoria y repasó el nombre de casi todos los interventores que se sucedieron en el PAMI desde el ‘89 a la fecha. Nombró a Alderete, pero a Carlos, el sindicalista de Luz y Fuerza que supo ser ministro de Trabajo con Raúl Alfonsín. El único nombre que el legislador rionegrino olvidó en su repaso fue precisamente el de Víctor Alderete.
A esa altura del debate, en el Salón Rosado, contiguo al recinto, se encontraba el titular de la Cámara de Diputados, el bonaerense Eduardo Camaño. El oficialismo apuraba el tratamiento del proyecto e intentaba por todos los medios que algunos de los oradores incorporaran su discurso en la versión taquigráfica. Camaño había adelantado a la prensa que si la iniciativa oficial era aprobada antes de las 20, el tema pasaría inmediatamente a la Cámara baja. No fue así y el tema comenzará a tratarse a partir de las 11 de hoy.
La porteña Vilma Ibarra fue una de las primeras en ponerle el cascabel al tema. “Todos entendemos que estamos enfrentando a la corrupción en el PAMI”, dijo para poner blanco sobre negro un tema que si bien flotaba en el aire ninguno hasta ese momento había llamado por su nombre.
“Yo no tengo ninguna pelea con el Presidente porque quiero que le vaya muy bien”, señaló a su turno el gastronómico Luis Barrionuevo. El gremialista intentó la defensa del directorio del PAMI y negó cualquier influencia sobre la obra social de los jubilados. “A mí se me presenta como el capo mafia que tengo que ver con todas las instituciones. Yo no pongo, ni sacó a nadie. Yo no dirijo ninguna institución salvo donde me votaron para ello.” Sin recurrir a ningún ayudamemoria, sin trabarse en su oratoria y hablando como cuando se conoce un tema en profundidad, el catamarqueño insistió con que se quiere politizar y mediatizar el tema del PAMI. Por cierto, realizó un repaso minucioso de las distintas administraciones que pasaron por la obra social de los jubilados y hasta recordó que “todos vimos por televisión cómo se pagaban coimas” a prestadores del PAMI, dijo como al pasar y embistió duramente contra el ministro de Salud, Ginés González García, y el representante del Gobierno en el directorio del Instituto, el mendocino Juan González Gaviola.
Hubo tiempo para que la catamarqueña Marita Colombo recordara algunas causas en las que se investiga a algunos prestadores y para que el jujeño Gerardo Morales recalcara que uno de los proveedores de prótesis médicas es auspiciante publicitario de Chacarita Juniors, el cuadro que preside Barrionuevo.
Fernández de Kirchner arrancó diciendo que hablaría sin eufemismos y así lo hizo. Puso la responsabilidad en los legisladores y les recordó que “se llegó a escuchar en los pasillos del Parlamento que se cambiaba la no revisión de las cuentas de la Universidad de Buenos Aires por la no revisión de las cuentas del PAMI”. La mención tenía nombre y apellidos y la camiseta de radicales y peronistas. Pero nadie se hizo cargo. Las palabras de Kirchner eran seguidas con un silencio que mezclaba la admiración, el respeto y la aprobación. A lo largo de toda la jornada el Presidente había seguido la marcha del debate con continuos llamados al celular de la senadora. Habló del Estado cautivo y cooptado por los intereses privados. “Han sido la política y los sindicalistas los que pagaron los costos políticos, pero los que se llevaron la parte más grande de la torta no salen en la foto”, dijo la santacruceña. A esa altura el Gobierno había ganado la batalla.