Federico Elaskar, el ex dueño de la financiera SGI conocida como “La Rosadita”, pidió ayer su desvinculación de la causa por lavado de dinero por razones relacionadas con su salud psiquiátrica, informaron fuentes judiciales. Su abogado, José Uberia, presentó ayer un escrito ante el juez que lleva adelante la investigación, Sebastián Casanello, acompañado de un informe de un perito de parte que indica que padece un cuadro de falta de proteínas cerebrales que le impide afrontar un proceso penal. Ante el pedido, Casanello le pidió al Cuerpo Médico Forense una evaluación psiquiátrica para corroborar o descartar la afectación aducida. El artículo 77 del Código Procesal Penal establece que “si durante el proceso sobreviniere la incapacidad mental del imputado, el tribunal suspenderá la tramitación de la causa y, si su estado lo tornare peligroso para sí o para los terceros, ordenará la internación de aquél en un establecimiento adecuado”. Elaskar y Leonardo Fariña dispararon la investigación por la que permanece detenido el empresario kirchnerista Lázaro Báez, a partir de sus relatos sobre la ingeniería financiera que funcionaba en “La Rosadita”. Esos dichos fueron difundidos por el programa de TV Periodismo para Todos, que conducía Jorge Lanata. Elaskar, dijo que a través de esa financiera se enviaron al exterior más de 50 millones de euros de Báez y siempre estuvo en libertad. Fariña fue detenido pero quedó en libertad luego de acogerse al programa de testigos protegidos.