EL PAíS › SOLA ANUNCIO EN ROMA QUE CONVOCARA A INTERNAS
Sin fecha ni contrincantes
Lejos de mostrar sus cartas, los jugadores del truco en el que se definirá la interna del peronismo bonaerense siguen insinuando su poderío antes de que los naipes revelen sus verdaderas fuerzas. Desde Roma, el gobernador bonaerense Felipe Solá aseguró que cumplirá con la ley. Por lo menos con la que lo obliga a convocar a internas partidarias. Claro que a la hora de definir la estrategia de su sector no comprometió su participación en esos comicios.
“Yo estoy obligado a llamar a internas, que significa que cada partido diga en una misma fecha cuál será su lista de candidatos”, dijo el bonaerense. Cuando se le pregunta por la realidad del peronismo en la provincia, sostiene que “es muy compleja”. “No puedo decirle nada en ese sentido porque es complejo”, insistió al responder por la posibilidad de que el justicialismo efectivamente dirima en internas las candidaturas provinciales.
En los hechos, las futuras estrategias que se den los seguidores del denominado “felipismo” están atadas al resultado de las negociaciones todavía inconclusas que vienen insinuando el presidente Néstor Kirchner y el caudillo bonaerense Eduardo Duhalde.
“No conozco a fondo si hay conversaciones entre el duhaldismo y el gobierno nacional”, remarcó Solá ante una consulta periodística. El gobernador también insistió en que su objetivo apunta a generar “una fuerza propia” que lo “ayude a gobernar”. En los hechos, ése fue su discurso desde que decidió la ruptura del bloque del peronismo bonaerense. Algo que los duhaldistas se encargan de ridiculizar cuando dicen que “es la primera vez que ven que un dirigente rompe un bloque mayoritario para quedarse en minoría”.
“(Que me ayuden a gobernar) es el sentido de mis declaraciones y el sentido de mis movimientos. Una interna es una palabra que indica encono de unos contra otros dentro de un mismo grupo y, en realidad, lo que me pasa a mí es que yo necesito legisladores que me respondan”, advirtió Solá. En este punto, el gobernador les critica a los duhaldistas que así como acuerdan darle superpoderes a Kirchner a nivel nacional, no se los votan a él en la provincia de Buenos Aires. En este punto cargó nuevamente contra los duhaldistas de la Legislatura bonaerense, a quienes les endilgó que “tratan sólo las leyes que parecerían tener como único sentido impedir la marcha del gobierno bonaerense o hacerla más difícil”.
Para graficar sus dificultades, dijo: “No tengo quórum. Tengo una cuarta parte del total de legisladores y aspiro a que en las elecciones (legislativas de octubre) ese espacio se amplíe, porque para gobernar hay que tener ese apoyo”, afirmó. Aunque todo indica que las cartas están echadas, todavía el juego está muy conversado.