EL PAíS • SUBNOTA
Feminista. “Tenemos en la Cámara un diputado patotero, que insultó y amenazó a una diputada de mi bloque”, dijo la diputada de la Coalición Cívica Claudia Gil Lozano y enseguida lanzó su crítica feminista: “Es terrible y sus colegas compañeros no dicen nada. Cuando discutimos aquí la ley contra la violencia de género, nos dejaron a las mujeres solas en el recinto.” Los hombres siguieron callados, pero por lo bajo no pocos recordaron el cachetazo que la diputada Mary Sánchez le asestó al jefe del bloque menemista Jorge Matzkin en medio de un debate.
Saludo actuado. El anuncio del adelantamiento de las elecciones los encontró en veredas opuestas y produjo un pico de tensión entre ambos, pero con el correr de los días Felipe Solá y Francisco de Narváez recompusieron su relación y ayer actuaron públicamente en consecuencia: se dieron la mano en medio del recinto, a la vista de todo el mundo.
Pingüinos amenazados. Chicana más, chicana menos, la mayoría de los radicales fundamentaron su oposición en cuestiones políticas e institucionales. En cambio, el bonaerense Rubén Lanceta eligió otro camino. “Cualquiera sea la fecha de la elección, la oposición va a llenar las bancas de este recinto”, pronosticó primero. Después aseguró que la quinta de Olivos “no es territorio bonaerense sino federal”, en alusión del posible cambio de domicilio del presidente del PJ Néstor Kirchner. “Los pingüinos deben vivir en la zona fría –siguió Lanceta–. En la provincia de Buenos Aires se mueren, duran poco tiempo”, vaticinó al final Lanceta, en alusión a un eventual desastre político más que ecológico.
“Frases hechas”. Cecilia Merchán volvió a tomar distancia del kirchnerismo con su voto en contra del cambio del calendario electoral. Su discurso en el recinto fue seguido con atención por los diputados de la oposición. Para Merchán los argumentos presidenciales de adelantar las elecciones para luego abordar las medidas que permitan enfrentar la crisis internacional “suenan a frases hechas. Las mismas que ya escuchamos como ‘con la democracia se come, se educa y se sana` o ‘la casa está en orden`”. Los argumentos de la diputada cordobesa cayeron peor en el radicalismo que entre los K.
Inseguridad. Varios diputados, como Norma Morandini y Miguel Bonasso, criticaron duramente las consignas de la convocatoria a la marcha por la seguridad en Plaza de Mayo. “Por la influencia de estos nuevos tribunos autoconvocados e inventados por los grandes medios de comunicación, como la señora Susana Giménez o el señor (Marcelo) Tinelli u otros más, estamos en vísperas de otra marcha contraria y repugnante a los principios del Estado de derecho, en la medida en que se basa en el sostenimiento de la pena de muerte”, afirmó Bonasso.
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