Cuentas, planillas, especulaciones. Los candidatos del FIT iban y venían con el optimismo de la voluntad y el pesimismo de la razón, al decir de Antonio Gramsci. Esto es, conformes con haber hecho “una gran elección”, pero realistas con respecto a los votos que les faltaban para conseguir diputados. “Por el sistema D’Hont, el PRO en Capital entra con un 6 por ciento, y nosotros no, con el 5,8”, se quejaba Marcelo Ramal, calculadora en mano. Las voceras Mariela Solesio y Marcela Soler, atentas a cada periodista que ingresaba al bunker, conversaban con los candidatos del PTS, José Montes y Myriam Bregman. “En provincia tenemos unos 300 mil votos, alcanzaría con 130 mil para obtener diputados; si tenemos que sacar más es por una cláusula proscriptiva que establece que hay que obtener el 3 por ciento del padrón”, dijo Montes. El pimer candidato a diputado por Capital, Gabriel Solano, dijo que “el FIT sacó un 20 por ciento más que el 14 de agosto, demuestra que llegamos a los que no nos votaron”, dijo.