Para Sergio Burstein, integrante de la agrupación de Familiares y Amigos de las Víctimas de la AMIA, la denuncia presentada por el fiscal Alberto Nisman contra la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y el canciller Héctor Timerman, entre otros, es “una opereta” que vinculó los cambios ocurridos en la Secretaría de Inteligencia semanas atrás. Burstein consideró que la denuncia es “una falta de respeto a las víctimas”. En el mismo sentido entendió la determinación de Nisman Olga Degtiar, miembro de la misma agrupación: “Estoy segura de que es un manejo político”.

“Esto es una operación vergonzosa de quien llevó adelante la investigación que Nisman puso en sus escritos: Jaime Stiuso”, denunció Burstein. Para Burstein, “Nisman se está victimizando porque es muy importante el apartamiento de Stiuso de la ex SIDE” y concluyó: “Esto es una opereta, es una falta de respeto a las víctimas y yo quiero que ahora demuestre todo lo que dijo en su presentación”.

En esa línea, el integrante de la agrupación que aceptó desde un principio el Memorándum de Entendimiento que Argentina firmó con Irán para esclarecer las responsabilidades por el atentado a la AMIA puso en duda la actuación del fiscal general. “Sería interesante que (Nisman) aporte desde cuándo tiene todo esto”, señaló en relación con las supuestas escuchas realizadas por personal de la Secretaría de Inteligencia, sobre las que el fiscal sustentó su denuncia, e incluso dudó de la naturaleza de esas escuchas: “Quisiera saber, por ejemplo, si las escuchas que tiene son legales o ilegales, como las que manejó el (ex jefe de la Policía Metropolitana, Jorge) Fino Palacios”.

“Estuvo diez años en la unidad fiscal exclusivamente por el atentado, con 50 empleados, y no pudo lograr esclarecer el tema AMIA. Y ahora está haciendo una denuncia terrible, para nosotros también. Lastima nuestra sensibilidad”, opinó Degtiar. Burstein aseguró que no le cree “nada” al fiscal.

Tanto él como Degtiar esbozaron una defensa de la gestión de Fernández de Kirchner respecto de la investigación sobre el atentado ocurrido hace dos décadas: “Nosotros hemos confiado siempre en la Presidenta que se presenta a Naciones Unidas con nuestro reclamo”, postuló ella. Burstein, en tanto, recordó que “si hubo personas que defendieron y dieron crédito a la investigación de Nisman fueron Néstor y Cristina Kirchner, basándose en la investigación que llevó adelante él mismo. Ellos llevaron la causa AMIA a los foros internacionales. Por eso, no se entiende esto sino como una opereta para denigrar y basurear a las víctimas y a los funcionarios”.

Ninguno de ellos dio crédito al contenido de la denuncia: “Esto es meter información adentro de la licuadora, batirla, tirar todo para arriba, faltándole el respeto a las víctimas y a la investigación”, abundó Burstein y lanzó un desafío sobre el corazón de la hipótesis misma de la denuncia de Nisman, que plantea el armado de un plan para “borrar a Irán del caso AMIA” con el fin de “restablecer relaciones comerciales” con ese país: “Quisiera saber en qué se incrementó el comercio con Irán. A ciencia cierta, sé que no se cayeron las alertas rojas y no se incrementó el comercio de Argentina con Irán”. Y Degtiar concluyó: “Lo que sí puedo creer es que Nisman esté buscando retirarse de la causa”.