–¿Mantendrá sus cuentas en el exterior?
–Hay dos que no puedo dejar de tenerlas. En una me depositan derechos de autor en Brasil. Otra porque tengo un departamentito en Madrid y ahí me depositan los alquileres. Son cuentas que necesito. La de Suiza, la de los 10 mil pesos, la voy a cerrar porque parece que trae más problemas que otra cosa. Uno habla de una cuenta suiza y parece que habla de millones.
–¿Cómo evaluó las críticas por su falta de aportes previsionales?
–No tenía regularizada la situación de autónomos, no me parece un pecado mortal, es una deuda, no una defraudación fiscal. Sabía que la tenía que regularizar y tampoco me habían emplazado. Estoy discutiendo cuánto es.
–¿Jacobo Grossman trabajará con usted? (Grossman es un viejo colaborador de Zaffaroni que cumplió una condena por secuestros en los ‘70).
–No porque no es el perfil. Es una persona muy inteligente y un abogado muy capaz. El perfil de la Corte es muy académico y especializado. Voy a tratar de llevar la menor cantidad de gente posible y la que lleve trataré de seleccionarla entre personas que estén trabajando en el Poder Judicial.