Los defensores de los marinos de la Escuela de Mecánica de la Armada volvieron a la carga. Intentan ganar tiempo ante el inminente comienzo de la etapa de alegatos, último tramo de este debate que ya lleva dos años y medio de extensión. El viernes pasado la defensa del Tigre Jorge Acosta recusó a los dos fiscales y a todos los integrantes del Tribunal Oral Federal 5. En tanto, están pidiendo al TOF que incorpore la última declaración del marino Adolfo Scilingo en Bahía Blanca, en la que negó todas sus confesiones y declaraciones sobre su participación en los vuelos de muerte.

Aun en medio de este horizonte, desde el TOF sostienen que los alegatos podrían comenzar el lunes próximo. Hubo audiencias ayer lunes y habrá el miércoles y el jueves para tratar estos planteos. El TOF ya desechó otra recusación presentada por el marino Ricardo Cavallo y destinada a los fiscales. Molesto por sus declaraciones públicas o en entrevistas, Cavallo les pidió a los jueces que los aparte. Sabido es que el ex hombre de inteligencia y operaciones del GT 3.3.2 es el único que va a diario a las audiencias y lo hace provisto de su computadora personal. Menos sabido es que aún ahora sigue haciendo inteligencia con las herramientas que tiene al alcance. El día de su indagatoria hizo proyectar en la sala de Comodoro Py fotografías de los fiscales durante charlas organizadas por distintos organismos de derechos humanos o halladas en alguno de sus espacios privados como el Facebook. Pese a la oposición de las partes, el TOF no lo interrumpió.

La megacausa ESMA lleva dos años y medio de debate. Comenzó con 67 imputados por delitos contra 789 víctimas. Esos números hicieron del debate el juicio más numeroso del país y el primero en investigar a los autores de los “vuelos de la muerte”. Pero el paso del tiempo dejó algunas huellas. Hasta abril, había 7 imputados menos entre los acusados. Cinco de ellos murieron: Carlos Galian alias Pedro Bolita, Raúl González, Carlos Jaime Fraguio, Carlos Orlando Generoso y Roberto Pérez Froio. Y dos quedaron separados por motivos de salud: Eduardo Morris Girling y Julio Antonio Torti.