Los policías que confesaron su participación en el crimen de Patricia Villalba aportaron un dato decisivo para la causa: cuánto se habría pagado para eliminar a la víctima y entre quiénes se repartió ese dinero.
Según el relato, se habrían pagado 60 mil pesos, que habrían sido aportados por Raúl Eduardo Lludgar, tío del único procesado en la causa. El dinero, según el relato, se habría distribuido en tres partes iguales: “Veinte mil pesos fueron para Musa Azar, otros veinte mil para (el entonces juez de la causa) Mario Castillo Solá, y el resto se repartió entre los policías Héctor Albarracín y Julio César Gómez”, sostiene el relato, según consta en el expediente.
Castillo Solá está detenido desde hace un mes, acusado de encubrimiento. También está detenido, desde el fin de semana pasado, Raúl Llugdar, lo mismo que su sobrino, Patricio Llugdar.
Los policías Albarracín y Gómez también forman parte del lote de detenidos, pero ellos serían los autores materiales del crimen de Villalba, junto con otro policía acusado, Francisco Daniel Mattar. Los tres ya estaban presos por el crimen de un ganadero, ocurrido en marzo.
El pago, para los investigadores, no fue un hecho aislado sino parte del modus operandi de la organización que comandaba Musa Azar.