El ex presidente Fernando de la Rúa se puso “a disposición” de la Justicia y ofreció el testimonio de funcionarios de su gobierno para rebatir la denuncia del arrepentido Mario Pontaquarto, quien lo acusa de haber dado la orden para pagar las coimas a ex senadores para aprobar la reforma laboral. En un escrito que suscribe junto a su abogado, Miguel Angel Almeyra, De la Rúa ofreció la declaración del ex jefe de la Casa Militar Julio Hang y varios edecanes presidenciales. También quiere que se escuche a sus ex secretarios privados Ricardo Ostuni, Leonardo Aiello y Ana Cernusco y a la ex directora de Audiencias Claudia Passano, para que desmientan la reunión que Pontaquarto dijo que se celebró en la Casa de Gobierno. Almeyra transmitió además su “inquietud” ante versiones periodísticas que indicaban que el magistrado “habría atribuido verosimilitud a los dichos de Pontaquarto” porque considera que esto implicaría “que la imparcialidad (de Canicoba Corral) resulte cuestionable”.