EL PAíS › ALVAREZ DEFIENDE SU PROYECTO Y DICE QUE LLAMARA A LA UTN
“Esto es la antítesis de la privatización”
“No, no recuerdo”, respondió el intendente de Avellaneda, Baldomero “Cacho” Alvarez de Olivera, cuando Página/12 le pidió que enumere de qué se trataban las siete sociedades anónimas. El pedido de este diario se hizo luego de que, en medio de la entrevista, el jefe comunal negara que una de las empresas está destinada al manejo del tributo de la comuna. “Tiene razón”, se rectificó el hombre al abrir el texto de la iniciativa que lleva el sello de su propia firma. El intendente se mostró tenso desde la primera pregunta. Esta vez el tema no era su decisión de aumentarse al doble su propio sueldo, de 3197 a 6700 pesos, ni los más de mil despidos que efectuó cuando inició su tercera gestión, en diciembre del 2003. Esta vez el punto era la polémica creación de siete sociedades anónimas, que involucran desde impuestos hasta el transporte público de la comuna.
–¿Por qué incluir a empresas privadas en el control de servicios públicos?
–Estas son sociedades anónimas con capital estatal mayoritario. Y no necesariamente van a ser empresas privadas las que van a participar. Queremos asociarnos a la Universidad Tecnológica Nacional y con otros entes oficiales. Y quizá también recurramos a empresas privadas. Pero este proyecto es la antítesis de la privatización. Tiene un mismo principio, pero con diferentes objetivos. Porque es el Estado el que va a decidir la política a seguir en cada sociedad.
–¿Cuál es el beneficio que genera la absolución de una dependencia municipal para transformarla en una sociedad anónima?
–Con la aprobación de este proyecto, el municipio va a conseguir la agilidad de una empresa privada con el control del Estado. Además, hay áreas que ya han sido privatizadas por la anterior gestión (a cargo del frepasista Oscar Laborde), como el control del tránsito, en la que la empresa se lleva la mayoría de las ganancias.
–¿Las decisiones sobre el accionar de cada sociedad anónima van a ser tomadas por parte de cada directorio?
–Sí.
–¿Y el Concejo Deliberante va a tener las mismas facultades para atender los reclamos que los ciudadanos hagan sobre los servicios públicos?
–Sí, claro.
–Pero las decisiones y las cuentas se van a rendir en la junta directiva, a puertas cerradas...
–No. Pero el Concejo va a poder pedir todos los informes que considere necesarios. No va a cambiar su funcionamiento.
En varios pasajes de la entrevista, Alvarez pone énfasis en todas las empresas estatales que existen en el país como ejemplos de su propuesta y enfoca sus respuestas en la anterior gestión, en los números deficitarios que Laborde dejó, en las cuentas que el actual gobierno comunal debe resolver. Y hasta se enoja cuando Página/12 prefiere ver más tarde los enormes listados de números en rojo que el jefe comunal insiste en mostrar para volver al proyecto de sociedades anónimas.
–¿El municipio recibió ofertas de empresas para sumarse a las sociedades?
–No, todavía no.
–¿Esta iniciativa cuenta con el apoyo del radicalismo?
–Todos los bloques deberían apoyar esta estrategia del municipio para poder mejorar el funcionamiento de los servicios.
El intendente busca dejar en claro que, pese a la presentación del proyecto, “todavía no hay nada definido”. Cuando tomó el texto de la propuesta para enumerar las siete sociedades, y este diario le preguntó acerca de los detalles de la empresa creada para el cobro de las cuentaspúblicas, el jefe comunal estimó que esta sociedad sólo atañerá a los “impuestos menores”, con lo que podría quedar afuera el cobro de Seguridad e Higiene y Barrido y Limpieza. Sin embargo, el proyecto no establece límites en este sentido. El jefe comunal asegura que su iniciativa es la “antítesis de la privatización”. Aunque, sobre el final de la entrevista, un poco más distendido, afirmó: “Hoy, multinacionales como Petrobras y Telefónica vienen a invertir a la Argentina. Creo que el país debe ir en ese sentido”.
Entrevista: M.S.