“No es un pecado mortal estar en permanente campaña para llevar a la Argentina adelante”, dijo ayer Néstor Kirchner. Fue para contestar a quienes, desde la oposición, lo cuestionan por hacer anuncios de gestión como parte de la estrategia electoral frente a los comicios de octubre. El Presidente se mostró sorprendido por lo que llamó “la calidad esquizofrénica de algunos”, en alusión a la titular del ARI, Elisa Carrió, y al líder de Recrear, Ricardo López Murphy. “Cuando uno gobierna está permanentemente en campaña para hacer las cosas bien y para que la gente lo entienda”, insistió Kirchner durante la presentación del balance de gestión 2004-2005 del Ministerio de Desarrollo Social que encabeza su hermana, Alicia Kirchner. “No nos avergüenza, no vivimos de la hipocresía y no vivimos de falsas poses que tanto daño le han hecho a la Argentina”, sostuvo. Resaltó que el gobierno nacional seguirá “volcando recursos al sector social” de manera “totalmente alejada del clientelismo”. “Es imposible”, dijo también, creer que “se puede salir del infierno de un día para otro” en un país “devastado durante tanto tiempo”.