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Sin alfombra roja ni fiestas ni con demasiados gastos. Sólo con películas, y apenas unos pocos invitados. Así se presenta la decimoséptima edición del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, que tendrá su apertura oficial esta noche. Un festival que fue revivido a toda pompa en la mejor época menemista, pero que este año de crisis llegó a concretarse casi de milagro y contra todos los presagios. De hecho, cuenta con un presupuesto casi de emergencia: 900 mil pesos conseguidos a último momento, bastante menos que los 2 millones de dólares que costó la ya austera edición del año pasado. Acorde a la situación, la gala de inauguración de esta noche en el Teatro Auditorium constará, apenas, de un vino de honor en el hall de entrada, mientras en la explanada frente al mar un cuarteto de tango tocará para quienes quieran escucharlo.
Parecen haber quedado definitivamente muy lejos aquellas fastuosas inauguraciones con estrellas subiendo por la inmensa escalera emplazada frente al Auditorium, para los fotógrafos y las cámaras de televisión, sin olvidar a los curiosos que se agolpaban en las vallas, apenas para ver pasar por un instante a quien se pudiera considerar famoso. Lo que no se olvida, sin embargo, es que ya el año pasado la inauguración de la primera edición posmenemista tuvo su propio “escrache”. Aquella vez los que se manifestaron fueron los estudiantes universitarios, que cargaron embanderados contra las puertas del Auditorium durante aquella velada con Ballet incluido. Acaso se deba a ese fresco recuerdo tanta preocupación por destacar la humildad de un festival en el que, tal como subraya el crítico Claudio España –director de la muestra–, “las únicas estrellas serán las películas”.
De esta manera, la primera estrella en aparecer en Mar del Plata será Los excéntricos Tenembaum, el tercer opus de Wes Anderson, un joven director que fue descubierto por el público local en el primer festival porteño de cine independiente, cuando se exhibió su film Rushmore. Celebrado por realizadores consagrados como Peter Bogdanovich o Martin Scorsese –quien llegó a declarar que Rushmore era el mejor film norteamericano que había visto en los últimos tiempos–, Los excéntricos Tenembaum está considerado como su film más presentable para el gran público, protagonizado por un reparto que incluye a Gene Hackman, Anjelica Huston, Danny Glover, Ben Stiller, Gwyneth Paltrow y Bill Murray. Como sucederá con muchas de las películas anunciadas en el festival, esta función de apertura funcionará como virtual première de lujo de un film que, luego, se estrenará comercialmente antes de fin de mes.
La inauguración estará a cargo de Cecilia Laratro, acompañada por Duilio Marzio y Susana Freire, y seguramente estarán presentes tanto la legendaria actriz Claire Broom –que acompañará la exhibición de Candilejas, en ocasión del 50º aniversario del film de Chaplin– como el polémico Kenneth Anger, los únicos dos invitados especiales que llegaron esta semana a Buenos Aires. Anunciados para llegar la semana que viene están confirmados el director Roger Corman, que recibirá un premio especial a su trayectoria; los franceses Claude Lanzmann y Bertrand Tavernier, que acompañan sus últimas producciones, y Angela Molina y Jeanine Meerapfel, directora y protagonista de Anna’s Sommer, film ubicado dentro de la competencia oficial. También estarán presentes los seis integrantes del jurado oficial, presidido por la directora georgiana Nana Dzordjadze, anunciada a último momento por la deserción del iraní Dariush Mehrjui. Además de Dzordjadze, figuran la actriz argentina Mercedes Morán, la mexicana Blanca Guerra –conocida por su trabajo junto a Arturo Ripstein–, el director chileno Silvio Caiozzi, el productor norteamericano John Davidson y la teórica y crítica francesa Sylvie Pierre. Ellos serán los encargados de elegir al ganador del Ombú entre las diecisiete películas en competencia, entre las que figuran directores de renombre (Bogdanovich, Szabó), y dos pequeñas óperas primas argentinas: Vladimir en Buenos Aires, de Diego Gachassin, y Caja negra, de Luis Ortega.