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El domingo, San Pablo cumplió 450 años. Y para festejarlo, Caetano Veloso cantó ante 70.000 personas, al aire libre y en el centro de la ciudad. El principio fue con Fuerza extraña, un poco antes de la medianoche, bajo una permanente llovizna y vestido de blanco. En el escenario, montado en el cruce de las avenidas Ipiranga y Sao Joao, el gran artista bahiano interpretó varios temas como solista y luego fue invitando al escenario a otros artistas. Uno de ellos, compañero de ruta de Veloso en la creación del Tropicalismo, entre otras cosas, fue el otro gran protagonista de la noche. Por un lado por su trayectoria artística. Y por otro, porque es el ministro de Cultura del gobierno (y uno de los pocos del equipo que Lula no relevó del cargo). Gilberto Gil cantó con Caetano Desde que el samba es samba y, en el final, se plegó al homenaje a la ciudad y cantó algunas viejas canciones paulistas como Lampiao de gas y Sao, Sao Paulo. En primera fila estaba la alcaldesa de la ciudad quien aseguró, como quien dice el precio de las masitas que acaba de convidar: “Creo que los habitantes de San Pablo recuperan la autoestima con estas fiestas y con todas las inversiones que se han hecho”.