SOCIEDAD › UNA ASOCIACION BOLIVIANA DENUNCIO A INDEPENDIENTE POR RACISMO
Cuando el festejo es discriminador
El triunfo del Apertura fue con cánticos xenófobos. Para el club, solo fue parte del folklore. Ahora debe decidir la AFA.
Por Horacio Cecchi
Que el fútbol es una caja de resonancia nadie lo duda. Lo confirman las depresiones comatosas y las alegrías paroxísticas que invaden a pueblos enteros según los resultados. En diciembre pasado, el plantel de Independiente festejaba a rienda suelta su victoria como visitante ante San Lorenzo y la obtención del Torneo Apertura. El festejo tuvo sus bemoles: dedicaron irónicamente el título a los xeneixes de Boca Juniors con cánticos hirientes contra bolivianos y paraguayos. Una asociación representante de la comunidad boliviana presentó una denuncia por
discriminación ante la AFA. Todo indica que el jueves próximo el Tribunal de Disciplina se expedirá sobre el asunto, aunque aún está en discusión si se sancionará al club o a los jugadores; en qué consistirá el castigo, y más aún, si habrá o no sanciones. Cinco meses antes, la propia FIFA se reunió en congreso extraordinario para debatir sobre el problema del racismo en las canchas. Paradójicamente, la sede del congreso fue Buenos Aires. Opinan Pablo Jacoby y Pablo Slonimsqui, dos abogados del Centro Simon Wiesenthal y especialistas en casos de discriminación.
Fecha: 1º de diciembre del año pasado. Estadio de San Lorenzo, vestuario visitante. Tras su victoria por 4 a 1, el plantel de Independiente festejaba la obtención del Torneo Apertura. Todo hubiera quedado en el festejo de no haber sido por el cántico dedicado a los xeneixes, aunque epítetos y calificaciones fueron cargados sobre bolivianos y paraguayos. El hecho fue grabado por la tevé y el fútbol volvió a ser caja de resonancia.
La Acción Cívica Boliviana de Reivindicación Marítima y Asociación Deportiva Altiplano presentó una denuncia por discriminación ante la AFA, lo que motivó la apertura de un expediente. Los estadios de fútbol locales no podrán considerarse virginales respecto al tema: All Boys fue sancionado con una multa de 200 entradas durante tres partidos porque su hinchada mostró una bandera nazi en un partido contra Atlanta. A Defensores de Belgrano le ocurrió algo semejante por arrojar jabones contra el mismo equipo. Y la AFA llegó a establecer veedores del Inadi en los estadios. Pero en el caso de Independiente, algunos miembros del Tribunal de Disciplina plantearon objeciones formales (la validez de la denuncia de un particular ajeno al ámbito de la AFA), que ocultaban otra cuestión: es más complejo sancionar a uno de los grandes.
Independiente respondió en su descargo que esos cánticos forman parte del folklore en los estadios, que los jugadores del plantel se limitaron a reproducirlos “en un estado emocional muy especial y en la intimidad del vestuario”. El club acompañó documentación que acredita las buenas relaciones entre Independiente y la comunidad boliviana, aunque todo indica que tal documentación quedó desactualizada.
La preocupación sobre manifestaciones de racismo es evidente en la AFA. El reglamento habilita al árbitro a suspender el partido ante una expresión racista. Es más, el 7 de julio de 2002, la FIFA realizó un congreso extraordinario en Buenos Aires, que resolvió en su punto 9 “exigir a los clubes la promoción de un espíritu de integración social entre los jugadores que garantice un trato respetuoso y sin discriminaciones por origen étnico a compañeros, adversarios, árbitros, oficiales, espectadores y a cualquier otra persona, esté o no relacionada con el deporte”. Para el jueves próximo se espera el fallo del Tribunal de Disciplina, y aunque el punto 9 no parece cumplido, aún se mantienen dudas por la complicación de sancionar a un plantel entero; se debate si el club es responsable (aunque en el caso de las barras bravas lo es), y hasta se duda sobre si existirá sanción y en ese caso de qué tipo será.
“Cualquier episodio antidiscriminatorio en el ámbito del fútbol se potencia hacia la sociedad de una manera superlativa –sostiene Pablo Jacoby, abogado especialista en discriminación, del Centro Simon Wiesenthal–, porque el escenario del fútbol es una caja de resonancia de tremenda eficacia.” “Los cantos de intolerancia no sólo afectan a lacomunidad que atacan –agrega Pablo Slonimsqui, también abogado del mismo centro y autor de La Ley Antidiscriminatoria y Derecho Penal Antidiscriminatorio–, sino también a una sociedad pluralista, y abren la puerta a que se ataque a la sociedad en su conjunto.” Ambos especialistas sostienen que “no todo es delito, como en el caso de los cánticos, pero se lo puede analizar desde una perspectiva disciplinaria. La actitud del plantel de Independiente debe ser debatida como conducta disvaliosa que merezca un reproche administrativo o una condena social. Los representantes de la AFA tienen que hacer público el límite de lo que está mal”, y citan un ejemplo: “En un partido en España, un barrabrava fue detenido por portar una bandera nazi y luego fue liberado sin sanción. A la semana siguiente, en las tribunas flameaban miles de banderas nazis”.