La ambulancia del SAME que el domingo al mediodía fue robada de la puerta del Hospital Zubizarreta, en Villa Devoto, apareció ayer estacionada en una calle de Gualeguaychú, ante una estación de servicio. Un llamado al Comando Radioeléctrico alertó sobre su presencia y desde entonces, durante horas, personal policial de civil montó guardia en los alrededores. Requisado el vehículo y detenido el hombre al que los testigos señalaron como quien lo manejaba, la policía confirmó que se trataba de la ambulancia robada, aunque le habían cambiado la patente. “La ambulancia quedó intacta”, afirmó el director del SAME, Alberto Crescenti, quien viajó hasta Entre Ríos para determinar, junto con efectivos policiales y personal judicial, si del vehículo faltaban algunos de los equipos de alta complejidad con que está provisto. En la noche de ayer, confirmaron fuentes judiciales a este diario, se apuraba la requisa completa de la ambulancia, para procurar su pronta devolución al servicio de salud porteño. Desde la tarde de ayer, el sospechoso de haber robado el vehículo se encuentra detenido por pedido de la fiscal Lucrecia Lissi. Al mismo tiempo se realizaba un allanamiento en su domicilio.

A última hora de ayer, confiaron a Página/12 fuentes judiciales, todavía se desconocía si el detenido había actuado con ayuda de un cómplice, pero ya se habían secuestrado “los CDs con imágenes de un trayecto de ruta que hizo (la ambulancia) en el interior de la provincia de Entre Ríos, para que el fiscal las analice y dé orden de detención si determinara que hubiese otra persona”.

La policía de Gualeguaychú encontró la ambulancia Mercedes-Benz Sprinter con la patente cambiada. Estaba estacionada ante la estación de servicio “La Posta Vieja”, de calle Urquiza Oeste, en la parada 14. La Justicia porteña ya había emitido un pedido de captura por el vehículo, pero los datos de la patente no coincidían con los de la chapa que ostentaba la ambulancia al momento de ser hallada por personal de la comisaría 6ª, luego de que, explicaron fuentes judiciales, testigos del lugar llamaran al Comando Radioeléctrico. “Aunque la patente no coincidía con la del pedido de captura, hicimos una verificación del vehículo y constatamos, por la alta complejidad del instrumental, que era la que requerían desde Buenos Aires”, detalló el comisario mayor Vicente Giménez, jefe departamental de la policía entrerriana.

Los testimonios “ciertos, muy contundentes” señalaron que habían visto al hombre luego detenido llegar al mando de la ambulancia y “descender del vehículo después de depositarlo en el parador ‘La Posta Vieja’”, explicó Giménez. El sospechoso, Sergio Daniel Salischiker, fue identificado fácilmente, dijo el comisario mayor, porque “es una persona que vive cerca de ese parador y es conocido en ese vecindario”. Durante algunas horas, personal policial de civil observó la actividad y aguardó a que el hombre, o alguien más, regresara en busca de la ambulancia. Como nadie iba a buscarla, la policía “decide abordar el vehículo y empezar los peritajes” en cuanto a la fuerza provincial le transmitieron el número de motor y chasis, para determinar si se trataba del vehículo robado, aunque la patente no coincidiera con la denunciada.

Poco después, cuando el señalado como conductor de la camioneta regresó a la zona, fue interceptado “en la vía pública, cuando volvía al parador. Lo interrogamos, incurrió en incoherencias, se quería hacer pasar como empleado del SAME y decía que estaba de licencia médica, que en un arrebato había llegado a Gualeguaychú para visitar a un amigo”, contaron a Página/12 fuentes de la investigación. “Todo lo que dijo se chequeó y fue inverosímil, insostenible, y por eso fue llevado a jefatura, donde quedó a disposición de la fiscal de turno, que dispuso el arresto”, señaló el comisario mayor Giménez.

La ambulancia había sido robada el domingo al mediodía. Su conductor había terminado de limpiarla, la ingresaba al Hospital Zubizarreta y fue abordado por dos hombres, uno de ellos armado, que tomaron el control del vehículo y llevaron consigo al chofer. El hombre fue dejado en Panamericana y Rolón, a la altura de San Isidro, desde donde alertó al SAME sobre lo sucedido.