El encargado de un club de tenis fue asesinado ayer a la madrugada de 16 puñaladas dentro del predio, lindero a la autopista Dellepiane al 3700, en el barrio de Parque Avellaneda. El cuerpo fue encontrado cerca de las 9.30 por un cliente del lugar que había alquilado una cancha. Se investiga si se trató de un homicidio en ocasión de robo, ya que no se halló el auto de la víctima.

Fuentes policiales informaron que el hecho ocurrió en el club Madison, situado en la colectora de avenida Dellepiane 3749, donde funcionan varias canchas de polvo de ladrillo.

El hallazgo se produjo alrededor de las 9.30, cuando un cliente que había alquilado una de las canchas arribó al lugar y encontró al encargado del club muerto cerca del buffet, una construcción baja de ladrillos a la vista y ventanales protegidos por unas rejas de hierro color negro.

Ante esa situación, el hombre llamó a la policía, por lo que personal de la comisaría 40 que recorría la zona se trasladó hasta el club.

Según las fuentes, los efectivos constataron que el encargado, identificado como Alejandro Daniel Flamingo, de 48 años, yacía en el piso, boca arriba y con manchas de sangre en distintas partes de su cuerpo.

Luego se presentó en el lugar personal del Servicio de Atención Médica de Emergencias (SAME) que confirmó que Flamingo estaba muerto y presentaba varias heridas de arma blanca.

En tanto, efectivos de la División Homicidios, de la Unidad Criminalística Móvil y de Transporte Forense de la Policía Federal se encargaron del traslado del cuerpo de la víctima a la Morgue Judicial, donde se realizará la autopsia, y de los distintos peritajes de rigor en la escena del crimen. Los forenses que revisaron el cadáver determinaron que Flamingo recibió un total de 16 puñaladas, 13 de ellas de frente y tres por la espalda.

Las fuentes señalaron además que los peritos secuestraron dos cuchillos que se cree fueron los utilizados para matar a Flamingo, un par de guantes de látex, un par de zapatillas y dos pares de medias que serán sometidos a análisis de laboratorio en busca de rastros de el o los asesinos.

Los investigadores también advirtieron que el tejido de alambre ubicado en el perímetro del club estaba cortado en uno de los extremos y que a Flamingo le faltaba su Chevrolet Corsa Classic azul, que habría sido robado.

Algo similar pudo haber ocurrido con el aparato que almacena las imágenes de la cámara de seguridad instalada en el buffet y que tampoco se halló en el lugar, agregaron los voceros.

Al mismo tiempo, no se habían localizado hasta ayer a la tarde testigos directos del crimen del encargado, que vivía a unas 15 cuadras del club, cerca del Parque Avellaneda, aunque solía ocupar una especie de habitación que había en el club.

“Generalmente, el club cerraba a la medianoche, especialmente en verano, y en ocasiones el encargado se quedaba a dormir allí”, explicó una fuente de la investigación.

Este dato, sumado a que los forenses estimaron inicialmente que el crimen fue cometido entre seis y ocho horas antes del hallazgo del cuerpo, llevan a suponer que Flamingo fue apuñalado durante la madrugada, añadió el investigador.

Ayer a la tarde continuaban con las diligencias en procura de determinar si existían más faltantes de valor del club que abonarían la hipótesis del robo, aunque no descartaban otras pistas sobre el móvil del crimen.

“Estamos investigando todas las hipótesis, pero pudo tratarse de un robo. No parece un crimen planificado ni premeditado, parece algo del momento”, dijo una fuente judicial.

El homicidio de Flamingo es investigado por el fiscal de Instrucción porteño 44, Pablo Recchini, y la secretaría a cargo de Raúl Fabián Fandiño.