El conductor del patrullero que el viernes atropelló y mató a Luciano Alt, de 6 años, en Villa Ballester, partido de San Martín, aseguró ante la Justicia que no vio a la víctima porque “salió de atrás de un auto”. El policía Jonatan David Godoy, de 28 años, señaló a la fiscal Ana De Leo que se trató de “un accidente”, al igual que lo hizo su acompañante, identificado como el teniente Juan Mateo Quintana, de 50 años. Ambos uniformados permanecerán detenidos por la muerte del niño. En menos de una semana, la Bonaerense de Villa Ballester atropelló a tres personas, de las cuales murieron dos.

“No lo vi, salió de atrás de un auto”, dijo Godoy al ser indagado por la fiscal de la causa, quien solicitó que el policía siga detenido acusado de “homicidio con dolo eventual”, esto es que se representó la posibilidad de que podía atropellar a alguien. Tanto el conductor como su compañero señalaron que se trató de un accidente. Según fuentes judiciales hubo “contradicciones” entre ambos hombres respecto a la supuesta versión de que se encontraban persiguiendo a un auto con ladrones. La fiscal De Leo solicitó al juez de Garantías 1, Mariano Porto, para ambos policías del Comando de Prevención Comunitaria (CPC) de San Martín, convertir la aprehensión en detención, aunque por distintos delitos.

En el caso de Godoy, la fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 de San Martín le imputó el delito de “homicidio simple con dolo eventual”, al considerar que debió representarse la posibilidad de un hecho como el sucedido y extremar las precauciones en la conducción del patrullero porque en la zona había un corso donde había niños. En caso de que el juez no coincida con esa calificación, la fiscal le imputó de manera alternativa la figura de “homicidio culposo”, es decir, que cometió un crimen sin intención. En cuanto a Quintana, De Leo lo acusa por “incumplimiento de los deberes de funcionario público”, por no haber avisado al CPC lo que había ocurrido para denunciar el delito que su compañero cometió, luego del hecho en el que murió el niño.

Se trata del segundo caso en una semana en el que un patrullero embiste a una persona en la misma zona, ya que el 7 de febrero Beatriz Zampella, de 82 años, murió luego de ser atropellada por otro vehículo policial del CPC de San Martín que circulaba en contramano, sin luces ni sirena, y chocó con un camión. La fiscal analiza una serie de videos aportados por el municipio en los que se observa parte del incidente en el que murió Luciano, y esperaba los resultados de los peritajes que ayer hicieron en el lugar del hecho y con el móvil involucrado expertos de la Gendarmería Nacional. De Leo quería saber a qué velocidad circulaba el patrullero, si lo hacía o no con luces encendidas, baliza policial y sirena, y si existía una situación de emergencia.

De acuerdo con los registros del GPS que tienen instalados todos los patrulleros y a los primeros estudios realizados por peritos de Gendarmería, el vehículo que manejaba Godoy circulaba por la calle donde ocurrió el hecho a 16 kilómetros por hora. Sin embargo, en la causa hay testimonios de vecinos que afirman que el patrullero aceleró segundos antes de embestir a Luciano. El hecho ocurrió al viernes, alrededor de las 23.30, justo cuando Luciano festejaba su cumpleaños y estaba en la calle jugando con los chicos de la cuadra, en el cruce de las calles Agustín Alvarez y Mendoza, de Villa Ballester.

Al respecto, el Diputado Nacional por el Frente para la Victoria (FpV) Leonardo Grosso, mostró su apoyo a los familiares de las víctimas. “Acompañamos a la familia de Luciano en el pedido de apartar a la Policía Bonaerense de la investigación”, sostuvo el diputado en sus redes sociales, y subrayó que es necesario “remover la cúpula policial de San Martín para determinar responsabilidades”.