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Como piqueteros del apagón, vecinos de la zona norte de la Ciudad de Buenos Aires comenzaron ayer a cortar el tránsito en avenidas, para protestar contra los cortes de luz que, a más de tres días de la tormenta que los inició, no habían terminado de solucionarse. El gobierno porteño arreció en sus críticas a la empresa Edenor, blanco de varias acusaciones: no habría destinado suficiente personal a remediar los daños ni a informar a los usuarios, y no contaría con cámaras adecuadamente impermeabilizadas. “Otras veces hubo inundaciones importantes y el servicio se restableció antes”, señaló el secretario de Infraestructura y Planeamiento porteño, Roberto Feletti. La empresa retrucó que “la lluvia superó todo lo previsto”, que “las cámaras ya desagotadas volvían a inundarse” y que “por seguridad, no se puede dar servicio cuando los sótanos están inundados”. Mientras tanto, como había sucedido hace tres años, comerciantes de Belgrano tuvieron que liquidar de apuro mercadería afectada por la inundación.
“El gobierno de la Ciudad decidió solicitar formalmente al Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) que sancione a la empresa Edenor”, anunció Feletti a este diario. Y detalló: “Otras veces hubo inundaciones importantes y el servicio se restableció en un lapso más breve que esta vez. Hay un vacío informativo de parte de Edenor, y eso generó graves dudas; Edesur, con 400 usuarios sin servicio, precisó que había destinado 20 cuadrillas para atenderlos; Edenor, con 14.000 usuarios sin luz, no definió cuántas cuadrillas destinaría; tampoco dijo con cuántos telefonistas contaba para atender los reclamos”. El funcionario señaló sus “dudas” en cuanto a “que la empresa no haya aplicado técnicas de impermeabilización, que las hay, para las cámaras que están ubicadas en zonas anegables”.
El jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra, solicitó la intervención de Julio De Vido, ministro de Planificación Federal de la Nación, del cual depende el ENRE, cuyo vicepresidente, Ricardo Martínez Leone, se reunió anoche con el secretario de Energía de la Nación, Daniel Cameron. Luego del encuentro, una fuente del Ministerio de Planificación aseguró a este diario que “se analizan severas y profundas sanciones a Edenor, que a su vez podrían tener impacto en la renegociación del contrato de concesión”.
Como siempre que se produce un corte de servicio, el ENRE inició un sumario. Según una fuente de ese organismo, “se tomará en cuenta que el hecho se añade a otros, como el del 16 de octubre del año pasado, que afectó a 450.000 usuarios (parte de ellos, de la empresa Edesur); otros cuatro apagones el mismo mes; uno en noviembre; dos en diciembre, uno de los cuales afectó a 300.000 usuarios; y otro el 21 de enero”. Las multas aplicadas por el Ente pueden tener carácter “resarcitorio”, en cuyo caso su importe se destina a los usuarios afectados por el corte, o sancionatorio, caso en que el importe va al Estado.
Entretanto, en la tarde de ayer, la empresa Edenor anunció “la normalización del servicio en media tensión” y admitió que continuaba “la reparación de averías en clientes individuales, en baja tensión”. Según explicó Mario Yaniskowski, vocero de la empresa, “la cantidad de lluvia fue superior a todo lo previsto. El corte del suministro se produjo mayormente en áreas ubicadas sobre los arroyos Medrano, Maldonado y, en menor medida, el Vega, que no podían desagotar fácilmente porque las desembocaduras estaban taponadas por la sudestada. Además, en cámaras que habíamos secado el sábado, sucedió que el domingo estaban otra vez llenas de agua que venía de la napa freática, y las bombas no daban abasto. Y, por razones de seguridad, es imposible devolver el servicio a edificios donde el sótano o las cocheras siguen inundados”.
El hecho es que anoche continuaba sin luz una cantidad no precisada de vecinos en las calles Thames, Uriarte, Oro, Paraguay, Cabrera, Niceto Vega, Córdoba y Serrano, de Palermo Viejo, como así también, más hacia eleste, en Salguero y Paraguay; en el barrio de Belgrano, el suministro sólo había vuelto en algunas viviendas de las calles Blanco Encalada, Olazábal, Monroe, Roosevelt y Mendoza. Alberto González, de la Comisión de Inundados de Belgrano, denunció que “en Cabildo y Olazábal, la luz había vuelto pero se cortó otra vez porque el generador que había instalado Edenor se quedó sin gasoil”.
Pasadas las 19, unos 200 vecinos inundados cortaron el tránsito en Cabildo y Blanco Encalada, donde protestaron con cacerolazo y bombos “porque esto es un ping-pong: Ibarra le echa la culpa a Edenor y Edenor a Ibarra”, según González. A las 17.30, vecinos del barrio de Saavedra habían piqueteado en la avenida General Paz: cortaron los dos carriles destinados al tránsito pesado a la altura de la calle Melián. “Estamos cansados: ni Edenor ni el Ente Regulador nos dan soluciones”, dijo uno de ellos. Otros recordaban que deben pagar “en tiempo y forma” el servicio y una vecina deploró el hecho de que “cuando llamamos para reclamar, nos pasan el disco” con un mensaje grabado.
Y, nuevamente, comerciantes inundados tuvieron que liquidar sus mercaderías a la fuerza: ayer, en Cabildo y otras calles de Belgrano, se vendían a bajo precio ropa y zapatos de negocios cuyos depósitos, en sótanos, habían quedado bajo el agua. En el barrio se hablaba de miles de dólares en pérdidas.