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El juez en lo penal económico Bernardo Vidal Durand reactivó la investigación por las narcovalijas y escuchó ayer al detenido Walter Beltrame, uno de los ex encargados de Southern Winds en el aeropuerto de Ezeiza, quien volvió a acusar a sus ex jefes de la empresa aérea, aportó documentación, reiteró que es inocente, pidió careos y hasta se enojó. También fue llevado a tribunales el detenido Fernando Arriete, ex gerente comercial de SW, que reclamó la llegada del juicio oral por el contrabando agravado de 60 kilos de cocaína a España repartidos en cuatro valijas.
En los próximos días pasarán por los tribunales de Retiro los otros dos detenidos: el ex supervisor de SW Claudio Baudino y el ex encargado de la empresa en el aeropuerto de Madrid, Ariel Tamburrini. Más tarde le tocará el turno a Cristian Maggio, el gerente general de SW que denunció el caso como testigo de identidad reservada, que se presentará el 10 de junio; Enrique Montero, vicepresidente de la firma, que viajaba en el vuelo en el que iban las narcovalijas, concurrirá el día 13; y Juan Maggio, presidente de la compañía, irá el 14 de junio.
Vidal Durand se hizo cargo de la causa el 26 de abril pasado, luego de que la Sala B de la Cámara en lo Penal Económico desplazara al juez original, Carlos Liporace, por presuntas irregularidades cometidas durante la investigación y la falta de procedimientos de importancia decisiva para la causa. Tras estudiar el expediente, Vidal Durand decidió llamar a todos los involucrados nuevamente para escucharlos. Beltrame fue el primero.
El joven era encargado de Relaciones Públicas de SW en el aeropuerto de Ezeiza. Viajó a España el 14 de setiembre pasado, dos días antes de que las valijas llegaran a Barajas con la droga y terminaran dando vuelta en la cinta sin que nadie las retirara.
El juzgado le había preparado 135 preguntas, pero después de cinco horas, cuando iban 30 consultas, Beltrame se enojó porque –dijo– le estaban haciendo repetir su historia desde cero, como si nunca hubiera declarado. “Yo ya aporté todo de mí y hace meses que estoy detenido. Estoy amenazado, al igual que mi familia y mis abogados. ¿Y dónde están los culpables?”, lo increpó Beltrame al juez, según testigos de la audiencia.
Beltrame aseguró que seguirá colaborando con la pesquisa con la condición de que se hagan los careos que pidió con los ex directivos de la empresa que –reiteró– fueron los que ordenaban el envío de valijas sin pasajeros. El joven aportó documentación que, a su criterio, demostraría que esa práctica estaba institucionalizada y que se habría repetido en enero pasado, comentaron allegados a la defensa.