SOCIEDAD
“Todos en el plano de la sospecha” en el robo de cajas de seguridad
El monto robado fue de 120.000 dólares y 40.000 euros. El juez no descarta que fuera un trabajo interno. El banco sospechado.
Por Carlos Rodríguez
El juez federal Norberto Oyarbide, que investiga el robo de cuatro cajas de seguridad en la casa central del Banco Nación, informó que de dos de ellas –las restantes no tenían valores ni dinero a resguardo– se habrían llevado “120 mil dólares y 40.000 euros”, aunque aclaró que la cifra es provisoria porque “todavía no fue precisada”. El magistrado hizo saber que “no hay detenidos” y puntualizó que “en el plano de la sospecha están todos” los que trabajan en la entidad. Sobre el tema habló también el ministro del Interior, Aníbal Fernández, quien convalidó que las cajas “debieran ser seguras” y llamó a tener paciencia en lo que respecta a determinar las responsabilidades: “Hay que saber exactamente cómo fue lo que sucedió y tratar de que avancen las investigaciones y saber si es alguien de afuera el que entró o si es algún empleado infiel”. El Banco Nación, en su casa central y en algunas sucursales, tiene “varios antecedentes por robos y hurtos de cajas de seguridad”, dijo a este diario la abogada Nydia Zingman de Domínguez, especialista en el tema, ya que ha representado a damnificados en decenas de causas judiciales.
“Lo que hay que determinar ahora es si fue un robo o un hurto, es decir si hubo violencia para abrir las cajas o si lo hicieron utilizando otros métodos, sin violentar la cerradura; es posible que a partir de la difusión del hecho aparezcan otros nuevos damnificados”, anticipó la experta en juicios contra entidades bancarias por robos de boqueteros o por hurtos. “Ya se hicieron más de 150 juicios que sentaron jurisprudencia en favor de los clientes de una larga lista de bancos, dado que se han hecho denuncias contra el Boston, el Río, el Nación, la Banca Nazionale del Lavoro y el Francés”, entre otros.
“Vamos a escudriñar hasta el fondo, para ver qué es lo que logramos obtener”, dijo el juez Oyarbide, al referirse a la investigación sobre lo ocurrido en la bóveda subterránea del Banco Nación. Anticipó que los primeros que serán convocados a prestar declaración en la causa son los empleados que están “más próximos” al movimiento de las cajas de seguridad. Ahora se están haciendo “estudios de todo tipo para determinar si hay huellas, rastros y se revisa con cuidado el material de filmación, pero las cámaras no están ubicadas en el sector donde están las cajas”, explicó el juez que investiga el hecho.
Oyarbide no descartó la posibilidad de citar a la presidenta del Banco Nación, Felisa Miceli, quien por ser “la máxima responsable” de la entidad “es la que debe responder sobre las medidas de seguridad”. El juez dijo que investiga “todas las hipótesis” y por ese motivo piensa citar a todo el personal, porque “algún conocimiento tuvo que haber”, ya que “la casualidad en estos casos es bastante difícil”. El magistrado confirmó que son cuatro las cajas que fueron abiertas por los ladrones, pero sólo en dos de ellas había dinero y otros valores.
“Los hurtos, es decir, los casos en que no hubo violencia para abrir las cajas, son frecuentes, pero la jurisprudencia es muy favorable a los clientes desde que la Justicia falló en el caso Kogan, en el año 1992; en ese caso devolvieron todo lo que le habían sacado, más intereses, daño moral, lucro cesante, etcétera.” Lo importante, para el damnificado, es reunir “indicios que permitan convencer al juez, como el comprobante de venta de una propiedad, o de haber cobrado una herencia o del nivel de vida que lleva el afectado”.