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El rebrote de la violencia policial contra niños y adolescentes será llevado ante la Justicia. El Consejo de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes de la ciudad presentará en los próximos días nuevas denuncias penales contra comisarías porteñas. A la presentación judicial que incluye doce cargos contra la comisaría 40ª (por apremios, abuso de armas y privación ilegítima de la libertad, entre otros) se le sumarán, en lo inmediato, acusaciones contra la 12ª y la 16ª. A ellas les seguirán las otras cinco que, junto con las anteriores, registraron 30 detenciones de chicos sólo en lo que va de agosto. La decisión fue anunciada en el marco de la reunión constitutiva del Foro por los Derechos de la Niñez y Adolescencia y contó con el apoyo y la participación de los titulares de Abuelas de Plaza de Mayo, Unicef y la Defensoría del Pueblo porteña, además de legisladores y diversas ONG.
Tres de los 30 casos de detenciones de menores de 18 años fueron revelados ayer por este diario. Uno de ellos involucró a dos chicos de 13 y 17 años que habían sido atropellados por un taxista. Según la denuncia de los abogados del Consejo, los chicos reaccionaron contra el conductor por haberse negado a llevarlos al hospital. La policía asegura, en cambio, que los chicos intentaron robar al taxista. En menos de un minuto, 20 policías de la 16ª golpearon a los niños junto a una joven familiar de 19 años, embarazada, a quien también detuvieron y encerraron. El caso fue puesto como ejemplo por la titular del Consejo porteño, María Elena Naddeo, como una muestra del “rebrote de las detenciones arbitrarias” que incluyen “violencia e insultos intimidatorios que nos remiten a los grupos de tareas y patotas” del terrorismo de Estado.
En la firma de la constitución del Foro por los Derechos de la Infancia estuvieron la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto; el representante de Unicef, Jorge Rivera Pizarro, y la defensora adjunta del Pueblo porteño, Alicia Pierini, entre otros. En diálogo con Página/12, Estela de Carlotto consideró que le resulta “altamente llamativo” que el “recrudecimiento” de detenciones a menores “ocurra en épocas de campaña, en las cuales se victimiza a algunos sectores más que en otras oportunidades”.
Asimismo, la también responsable del Comité de Seguimiento de la Legislación sobre Infancia consideró que “cuando algo falla, sobre todo en comisarías que tienen jefes que deben rendir el porqué de esas acciones, hay que tomar medidas disciplinarias”; por lo cual señaló al gobierno de la ciudad y al nacional como aquellos que “tienen que dar las respuestas”. Coincidentes con ese argumento, los organismos que trabajan a favor de la infancia pidieron entrevistarse con el ministro del Interior, Aníbal Fernández, de quien depende la Policía Federal, para que “arbitre las medidas correspondientes”. Lo mismo se exigió para la Secretaría de Seguridad porteña.
Las entidades insistirán también en la necesidad de elaborar instrucciones para que se aplique correctamente la normativa que indica a las fuerzas de seguridad cómo deben desenvolverse con niños y adolescentes. Este punto debería “aclarar contradicciones de las normas y hacer aportes en la capacitación” de la Policía, señaló Naddeo. En cambio, para el titular de Unicef, Jorge Rivera Pizarro, el problema “no se soluciona sólo con mejorar la capacitación de las fuerzas de seguridad, sino con la disminución de factores que hacen que los chicos puedan deambular por las calles”. Asimismo, consideró que las detenciones “tienen que ver con la mentalidad creciente de que los chicos son una amenaza y, por lo tanto, sin motivos justificados, se reacciona contra ellos”.
El Foro que ayer tuvo su primera reunión trabajará sobre algunos objetivos inmediatos: la creación de una asignación universal para la infancia, la derogación de la Ley de Patronato y la aprobación de la Ley de Protección Integral a la Niñez. Si bien ninguno de sus miembros supo explicar losmotivos por los cuales aumentaron las prácticas policiales denunciadas, se hizo referencia a la “autonomía peligrosa” de la fuerza policial que “a veces parece una provocación a las instituciones democráticas y de derechos humanos”.
Luego de la reunión del Foro llegó Silvia Montes, madre de uno de los chicos detenidos el martes. Se presentó porque “como madre pienso seguir luchando para que a nadie le pase lo mismo; lo que le pasó a mi hijo y mis sobrinos no fue normal y no sé por qué la policía actuó de esa manera, agarrándolos del cuello y pegándoles cachetadas”, recordó.

Informe: Adrián Figueroa Díaz.