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Las víctimas mortales del sismo que afectó el sábado al sudeste de Asia habían superado las 30.000, mientras que oficialmente se calculaba que otras 42.000 personas habían resultado heridas y cientos de miles quedaron sin hogar. El terremoto, de 7,6 grados de magnitud en la escala de Richter, se sintió en el norte de Pakistán, de la India, y en Afganistán. Las tareas de rescate se complicaban porque muchas de las zonas estaban aisladas debido a la destrucción de las vías de comunicación. La comunidad internacional comenzó a enviar ayuda para las víctimas.
La zona de Cachemira administrada por Pakistán fue la más afectada, donde los muertos serían cerca de 30.000, según informó el ministro regional de Comunicación, Tarik Faruk. Luchando contra el tiempo, los equipos de rescate paquistaníes intentaban llegar a regiones del norte del país que tienen sus accesos obstaculizados, en donde estiman que hay miles de personas sepultadas bajo los escombros de sus viviendas. Además, en las 24 horas posteriores al terremoto se produjeron en la zona paquistaní al menos 20 réplicas de entre 5 y 6 grados que complicaron todavía más el trabajo de los rescatistas.
El epicentro del sismo se ubicó a unos 95 kilómetros al noreste de la capital de Pakistán, Islamabad. Muchos pueblos e incluso ciudades pequeñas literalmente desaparecieron del mapa, indicó el general de división Shaukat Sultan, portavoz del presidente paquistaní, Pervez Musharraf. Sultan señaló que el ejército y los equipos de rescate no pudieron acceder a todas las zonas afectadas y consideró que se trata de “una devastación sin precedentes” que pone a todo el país ante “un desafío gigantesco”.
En la capital de la Cachemira paquistaní, Muzaffarabad, unos 500 niños fallecieron bajos los escombros de una escuela. Y las autoridades temen que haya otros mil chicos aún atrapados en las ruinas del edificio. “Al menos el 70 por ciento de las viviendas en toda Cachemira han sido arrasadas”, declaró el ministro de Interior de Pakistán, Aftab Ahmed Sherpao. En la ciudad de Islamabad, fueron rescatados 94 supervivientes de las ruinas de un edificio de diez pisos, del que también fueron extraídos al menos 20 cadáveres.
El presidente paquistaní apeló a la comunidad internacional a poner a disposición de su país helicópteros de transporte con los cuales trasladar alimentos, tiendas de campaña, medicamentos y mantas. Ocurre que muchas de las carreteras que van hacia Cachemira están cortadas y la vía área es la única por la que puede llegar la ayuda.
En tanto, en la India el número de muertos llegaba a 650, mientras el de heridos era de 2000, según señalaron fuentes gubernamentales. El terremoto dejó 325 muertos a lo largo de la línea de control de Jammu y Cachemira. Y al menos otras 250 personas murieron en el distrito de Baramulia, 50 kilómetros al noroeste de Srinagar, la capital de la zona cachemira india. La cifra global podría aumentar porque doce localidades del norte del país son inaccesibles.