“Hay bancos que adelantarán la devolución de los ahorros”
El secretario de Finanzas Guillermo Nielsen explica cómo será la negociación con el FMI y los acreedores externos. También adelanta que se dolarizará la deuda pública en manos de las AFJP. Y realiza un anuncio impactante para los atrapados en el corralito
Por Roberto Navarro
El secretario de Finanzas fue el principal arquitecto del esquema que finalmente se les ofreció a los ahorristas para salir del corralito. Guillermo Nielsen está convencido de que en poco tiempo su estrategia derivará en un cambio en la relación entre banqueros y ahorristas. El funcionario adelantó a Cash que en los próximos días “varios bancos piensan devolver los depósitos a sus clientes, tal como lo permite el flamante decreto”. Este suplemento sabe que el Banco de Valores, es uno de ellos. En Economía esperan que la decisión de estas entidades empuje a otras a salir a competir. Nielsen también señaló que otros bancos, como el Provincia de Buenos Aires, están ofreciendo premios a sus empleados para convencer a los ahorristas para que tomen el bono estatal. Por primera vez desde que se declaró el default un miembro del equipo económico da un primer indicio sobre cómo se va a renegociar la deuda externa. “No queremos que los acreedores pierdan dinero”, afirmó el encargado de la negociación.
¿Por qué los bancos extranjeros se han manifestado en contra del nuevo plan bonos?
–Los banqueros cambiaron su posición en los últimos días. Hasta hace una semana pedían que el plan fuera compulsivo, pero no se puede. Esa posibilidad no pasa por el Congreso, que ya se la vetó al ex ministro de Economía Jorge Remes Lenicov. No olvidemos que por eso renunció. Y tampoco tiene acuerdo de la Corte Suprema de Justicia. Yo tengo que trabajar con la realidad. Había un sector que también reclamaba algunas compensaciones, pero esto es todo lo que podemos hacer hoy. Este es el mejor plan posible, tanto para los bancos como para los ahorristas. Hoy (por el viernes) estuve reunido con 15 banqueros que se mostraron comprensivos con la situación tal como está planteada.
¿Por qué cambiaron de opinión?
–Se convencieron de que llegó el momento de reconciliarse con la gente. Este plan les da la posibilidad de brindar nuevas alternativas a sus clientes. Se van a generar negocios alrededor de los instrumentos creados. Se va a abrir un abanico de productos que cada banco va a ir desarrollando. Van a dejar de estar metidos dentro de una muralla para empezar a hacer lo que tienen que hacer: recapturar a sus ahorristas. Necesitan regenerar la confianza lo antes posible. Cuanto más tiempo dure esta pelea con los clientes, más tiempo tardarán en recuperarlos.
¿Cuáles van a ser las nuevas alternativas que les van a ofrecer a los ahorristas?
–Ya hay varios bancos que nos avisaron que van a llamar a sus clientes para adelantarles la entrega de sus ahorros, tal como lo permite la nueva legislación. Están preparando campañas publicitarias que digan: “nuestros clientes vinieron a buscar su plata y se la llevaron”. En los próximos días lo veremos en televisión. Estoy seguro de que todos los que quieran seguir haciendo negocios en el país van a tener que reaccionar para no quedarse atrás. Otros bancos están ofreciendo a sus empleados un premio por convencer a los clientes de que reciban el bono estatal. Es el caso del Banco Provincia de Buenos Aires. Pero, además, cada uno, según su perfil, está analizando una cantidad de negocios que se abren con el nuevo decreto. La idea es cambiar el humor general: dejar de pelear y hacer negocios.
Si el bono no es elegido por una porción importante de los ahorristas, el problema del corralón y el corralito no habrá cambiado. ¿Tienen pensado qué hacer entonces?
–Somos conscientes de que no es la solución definitiva. Es sólo un primer paso. El tema no está cerrado. En adelante es la hora de los bancos. Son ellos los que tienen que lograr que el plan sea un éxito.
¿Qué porcentaje de ahorristas espera que elija el bono estatal?
–Creemos que van a ser más los que elijan esta opción, pero no puedo hacer futurología. Esperemos que venzan los plazos. Seguramente la gente va a esperar a último momento para decidirse. Dentro de un mes y medio lo analizaremos con los datos en la mano. Pero van a ser muchos.
¿Por qué piensa que deberían elegir un título público en lugar de sus depósitos reprogramados?
–En primer lugar, porque es la posibilidad que tienen de volver a la moneda de origen. Además, muchos de los que poseen depósitos los tenían como un ahorro a largo plazo y pueden esperar a que el bono se revalorice en el mercado. En ese caso les conviene diversificar su portafolio y pasar a bonos por lo menos una parte. La idea del Estado es que la distribución de pérdidas sea lo más equitativa posible para toda la sociedad. Y la manera de lograrlo es volver rápido a generar riqueza.
¿Es equitativo que los bancos se saquen el problema de los depósitos de encima y además le devuelvan la deuda pública al Estado, luego de haber recibido por ella altísimos intereses durante varios años?
–El Estado va a recuperar deuda. Eso no es malo.
Una deuda que se espera se renegocie con el resto de los acreedores con una quita de más del 50 por ciento.
–Cualquier solución tenía un costo. Buscamos la salida que significara una carga menor para la sociedad. Los bancos no tenían muchas posibilidades para pagarnos con otra cosa.
Se calcula que el Estado va a terminar gastando alrededor de 25 mil millones de dólares para compensar a los bancos, pesificar los créditos de particulares y empresas y devolver los depósitos en la moneda original. Una sociedad con un 50 por ciento de pobres subsidia a banqueros, empresarios y ahorristas. ¿Esa es una decisión equitativa?
–Nosotros distribuimos los costos terribles de esta crisis de la mejor manera posible. La idea central es que de esta forma se va a volver a generar riqueza rápidamente. Si eso no ocurre, los pobres van a seguir siendo pobres. Si reactivamos, esa cantidad de pobres va a durar poco tiempo. En el caso de los ahorristas, no se trata de inversores de riesgo, sino que son personas que pusieron sus ahorros en la inversión más conservadora del sistema. No me parece justo defraudarlos. Creyeron en el sistema, dejando su plata en los bancos.
Pero los que puedan mantener sus bonos, que serán los más ricos, van a recuperar más de lo que el sistema ofrecía. La garantía era de hasta 30 mil pesos.
–Es cierto, pero la intención es generar riqueza, no destruirla.
¿Van a seguir emitiendo dinero para salvar bancos?
–No, de acá en adelante vamos a ser muy cautelosos. Va a haber un nuevo plan monetario y se va a cumplir. Como dije antes, es la hora de los bancos. Es su responsabilidad seguir abiertos. Pero estoy seguro de que en las próximas semanas va a haber un cambio en la manera de ver las cosas y van a querer seguir haciendo negocios en el país.