Se denomina biocombustibles a los elaborados con biomasa, como el biodiésel y el bioetanol. El biodiésel se obtiene a partir de aceites vegetales, aunque también pueden utilizarse grasas animales. Las mezclas de gasoil de petróleo con hasta el 20 por ciento de biodiésel (conocidas como B20) pueden ser usadas en prácticamente todos los motores diesel sin modificaciones y son compatibles con la mayor parte de los sistemas de almacenaje y distribución. Mayores proporciones y aún el biodiésel puro (B100), pueden ser usadas con pequeñas adaptaciones (cambios de filtros, juntas y retenes). De hecho, Rudolf Diesel utilizó en 1900 aceite de maní en sus primeros motores. El bioetanol es un alcohol que puede sustituir total o parcialmente a las naftas, como ya se hace en Brasil con el alcohol de caña, o en Estados Unidos con el de maíz.