Si bien les “queda pendiente discutir la suspensión de los sumarios administrativos contra los empleados, la resolución del pedido al gobierno porteño de que desestime una demanda de 55 millones de pesos contra ocho trabajadores y el pedido de aumento de salario de un 40 por ciento”, los trabajadores del Teatro Colón suspendieron ayer las medidas de fuerza que tomaron para destrabar el conflicto y retomaron los ensayos, luego de llegar a un acuerdo con el Gobierno de la Ciudad para la reincorporación de 41 músicos despedidos y la restitución de los haberes descontados por los días de huelga. Los puntos restantes serán analizados el próximo lunes a las 11 en la Subsecretaría de Trabajo porteña.

El acuerdo fue firmado por los representantes de la asamblea de trabajadores del Colón, nucleados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), y el secretario de Recursos Humanos de la Ciudad, Andrés Ibarra. Según informó el secretario adjunto de ATE para la ciudad de Buenos Aires, Rodolfo Arrechea, el pedido inmediato de reincorporación de los 41 músicos despedidos y la reintegración de los días descontados por huelga ya están resueltos: en el primer caso, con los contratos firmados; y en el segundo, resta definir si el reintegro será en una o más cuotas.

Por otra parte, la agencia de noticias DyN aseguró que “fuentes del gobierno porteño informaron que el tema del aumento salarial está prácticamente acordado”. “Lo que está complicado es el retiro de la demanda, porque ya tiene curso judicial, y los sumarios, porque tienen intervención administrativa y judicial”, explicó la misma fuente. Sin embargo, el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, aseguró “no estar al tanto” del acuerdo ni de la suspensión de las medidas de fuerza en una aparición televisiva por la tarde, cuando ambas cuestiones ya habían sido comunicadas por las partes. Más allá de su falta de conocimiento u olvido, Macri subrayó que “el Gobierno de la Ciudad estuvo siempre a favor de reconstruir el respeto hacia el Teatro Colón y sus trabajadores”, algo que también ha olvidado demostrar, según las denuncias de los trabajadores. Hay que recordar que anteayer, el director del teatro, Pedro Pablo García Caffi, había declarado haberse vuelto “intransigente con la barbarie, con los gremialistas que se transforman en vándalos o con quienes tratan de imponer una atmósfera beligerante”, sin dejar de recordar que no le dan confianza los gremialistas.