Esta vez no vendrá Bush ni se hablará del ALCA. Anoche se presentó oficialmente el IV Congreso Iberoamericano de Cultura, que se realizará en Mar del Plata entre el 15 y el 17 de septiembre bajo el lema “Cultura, Política y Participación Popular”. Ante autoridades nacionales, artistas y embajadores, el secretario de Cultura, Jorge Coscia, describió junto a una mesa de especialistas los principales ejes del evento que reunirá a invitados de dieciocho países con el objetivo de convertir a la “inclusión y la integración” en un denominador común de la región. Organizada por la Secretaría de Cultura de la Nación y la Secretaría General Iberoamericana, la convocatoria dará la oportunidad de poner en primer plano varios temas pendientes para las sociedades del Hemisferio Sur. El eje temático de la edición 2011 –la anterior se hizo en Colombia y la próxima la organiza España– pretende dar una clara orientación social a las charlas, en sintonía con las experiencias que atraviesan los pueblos sudamericanos. Y es tan abultada la agenda que valió la pena el repaso que se hizo ayer en el Palacio San Martín. La encargada de comenzar a describir la catarata de actividades fue la directora nacional de Política Cultural y Cooperación Internacional, Mónica Guariglio. Frente a la balcanización que se ha favorecido históricamente, la funcionaria puntualizó que la meta es plantear una integración que “se fortalezca a través de la cultura”.

A la ciudad balnearia asistirán más de dos mil quinientas personas, para tratar temas como las nuevas formas de gobernabilidad y gestión cultural, las comunicaciones en la era de la información; la lucha por la identidad y el desafío de la creación de valor en el desarrollo de los países emergentes. Además habrá diálogos abiertos, como el que protagonizará la senadora uruguaya Lucía Topolansky –esposa del presidente José “Pepe” Mujica– que, acompañada por la periodista María Seoane, se referirá a los vínculos entre las mujeres, la participación y la militancia.

Las mujeres, de hecho, tendrán un rol central en el cronograma. La apertura artística de la primera jornada contará con la presencia de Argentina –curioso nombre para una cantante española–, Liliana Felipe, Teresa Parodi y Liliana Herrero. Guariglio también subrayó el valor que tendrán los “diálogos entre creadores”. Estas reuniones se llamarán Cofralandes, nombre inspirado en una canción de la chilena Violeta Parra: reconocidas figuras discutirán acerca del estado de situación de sus áreas específicas y elaborarán documentos que harán llegar a los ministros como herramienta para trazar planes a futuro. La nómina incluye a Juan Sasturain, Claudia Piñeiro, Guillermo Martínez, Octavio Gettino, Iván Sanjinés, Sergio Olguín, Diego Lama y William Ospina.

Dado que gran parte de la población americana está compuesta por gente muy joven, no podía faltar un espacio para los niños. El bloque dedicado a la infancia contempla una muestra con hitos de la producción cultural destinada a los chicos, otra de afiches sobre juguetes no sexistas y un tablero a escala humana simulando el juego de la oca. Los locos bajitos tendrán sus plenarios y podrán entregar las conclusiones y quejas a los ministros de Cultura. “Hablamos de hábitos que están en el corazón de los procesos transformadores”, resumió Guariglio, tras mencionar que los más grandes podrán disfrutar de las actuaciones de León Gieco, Rubén Rada y La Bomba del Tiempo.

El municipio marplatense no se quedó atrás y sumó propuestas. El intendente Gustavo Pulti se alegró de que su ciudad ratifique que es mucho más que un sitio de veraneo. “Es un símbolo que esto ocurra en un lugar tan identificado con la situación en el resto del país. Porque cuando la Argentina estuvo mal Mar del Plata lo sufrió. Hoy que el paisaje es otro, seguimos latiendo con el pulso nacional.” La Perla del Atlántico mostrará la variedad de sus músicos y, entre otras cosas, será la sede de un encuentro de skaters, surfers y muralistas. Juan Carlos D’Amico –presidente del Instituto Cultural de la provincia de Buenos Aires– remarcó la importancia de darles continuidad a las políticas relacionadas con la vida creativa de las sociedades, “porque son herramientas que derivan en inclusión, para pasar, luego, a plantear la distribución de la riqueza”. El secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias, no pudo asistir pero acercó un video en el que resaltaba la potencia de la cultura como constructora de ciudadanía, al “ser generadora de confianza y autoestima; no sólo en los individuos sino también en las naciones”. “Por tanto –concluyó– es un elemento básico para el desarrollo del tejido social y la democracia.”

Las sedes del congreso serán el Hotel Provincial, los teatros Auditorium y Colón, Villa Victoria y el Museo Hernández. Habrá mesas de debate, diálogos abiertos, los Cofralandes, foros de políticas culturales, un seminario de políticas en gestión musical, cine, artes visuales, visitas a museos y recitales. “Qué bueno es que más allá de las diferencias podamos trabajar en equipo”, ponderó a su turno Coscia, quien también llamó a esquivar las “ideas insulares de la cultura”. “Estamos aprendiendo que lo simbólico y lo creativo son transversales a las entidades del gobierno, las provincias y los municipios; y de ahí la necesidad de que haya políticas de Estado sostenidas en ese sentido”, dijo.

* Más información en www.culturaiberoamerica.gob.ar