La herencia de Mario Benedetti suscita una áspera polémica. El testamento redactado en mayo de 2008, que revoca uno de diciembre de 2007, establece como “único y universal heredero” a la Fundación Mario Benedetti, deja una renta vitalicia a su hermano Raúl y otra cantidad monetaria a su primo Oscar Domínguez Benedetti. Ariel Silva, secretario del escritor, anunció que la poeta Sylvia Lago presidirá la Fundación. Pero en una entrevista con el semanario Búsqueda, Raúl Benedetti afirmó que emprenderá medidas legales para solicitar la nulidad, ya que sospecha que a Benedetti “le hicieron firmar” un escrito que no reflejaba su voluntad. “Mario quería que yo presidiera la Fundación (...) Tengo una sensación muy desagradable con quienes se han portado tan mal, revoloteando como aves de rapiña ante su cuerpo.”