El director mexicano Arturo Ripstein (foto) reconoció ayer que se arrepiente “y mucho” de las críticas que vertió la semana pasada contra el Festival de Cine de San Sebastián (España), y admitió que fueron motivadas por la “ira” y la “furia agónica de la derrota”. El realizador había arremetido duramente contra el jurado del Festival y contra su director, José Luis Rebordinos, en una entrevista que le hizo el diario Gara, en la que, entre otras acusaciones, aseguró que el certamen donostiarra había pasado de ser serio a convertirse en “subnormal”. Ripstein, que se fue con las manos vacías tras participar en la 59 edición del Donostia Zinemaldia con Las razones del corazón, firmó una carta abierta en la que dice arrepentirse “y mucho” de sus palabras. El director de La perdición de los hombres, Principio y fin y La mujer del puerto explica en la misiva que en su carrera tuvo “la fortuna” de haber ganado muchos premios y “la desdicha de haber perdido galardones muchísimas veces”, lo que lo llevó a saber que “la profunda emoción del triunfo no se compara ni poco con la agonía de la derrota”. “Confieso que me arrepiento de algunas de las películas que he perpetrado, pero me arrepiento muchísimo más de las entrevistas que he dado”, dijo Ripstein, quien confiesa que siempre que las lee “parecen dichas por otra persona, un poco más imbécil” que él, lo que le da “mucha vergüenza”. El realizador mexicano confiesa que si fuera una persona “reflexiva o equilibrada” habría trabajado “en la alta pedagogía o en algo que requiera de delicadeza, diplomacia y buenos modales”. Por su parte, Rebordinos agradeció la carta pública de Ripstein y explicó que antes incluso de conocer el comunicado ya había dado por “zanjada” la polémica. Rebordinos, quien ha insistido en que las críticas de Ripstein no habían variado la admiración que siente por su obra, comentó que la carta hecha pública ayer “es tan brillante y tan divertida como es él”. Y agregó: “Es un gran cineasta porque es una persona con mucho que contar y mucho que decir”.