Sin perder los ánimos por su experiencia de inmersión en Londres que casi le cuesta la vida, el mago David Blaine está girando hace ya tres días a quince metros de altura –y apenas cinco grados de temperatura– sobre Times Square, en Manhattan, Nueva York. Y, si todo sale bien, hoy estará liberándose de las cadenas y grilletes que lo sujetan. Blaine adelantó que si logra desatarse en menos de dieciséis horas, los niños necesitados serán beneficiados. Sin establecerse fehacientemente cuál es la relación entre la obra de caridad y la proeza que desarrolla, Blaine dijo que repartirá vales de 500 dólares entre cien niños pobres elegidos por la organización Ejército de Salvación. El mago tiene 33 años y al cierre de esta edición llevaba casi tres días sin comer, ubicado en el centro de un giroscopio que lo mantiene girando permanentemente.