Un festival puede ser muchas cosas. Puede ser, simplemente, un sinfín de espectáculos puestos uno después del otro y más o menos al azar, o puede reflejar un concepto y una idea. Podría pensarse que para el pianista Adrián Iaies, director del Festival de Jazz de Buenos Aires, producir un sello discográfico (S’Jazz, donde grabaron muchos de los mejores músicos argentinos del género) fue una continuación de ser productor de (y de pensar cuidadosamente como objetos) sus propios discos. Y que la programación es una prolongación natural de esa tarea. “De algún modo –dice a Página/12–, después de varios festivales el asunto tiene que funcionar como funciona el jazz. Hay cosas que se convierten en tradiciones, que deben ser respetadas y cuidadas, pero al mismo tiempo uno no puede enamorarse de las formas. Ciertas cosas se acomodan. Es algo que no se ve de entrada; que hay que esperar que suceda. Cruces, por ejemplo, era una sección más, y se convirtió en una de las marcas del festival. En todos los festivales hay jams, pero en general sólo se trata de tomar un poco de más y ponerse a tocar ‘Días de vino y rosas’. En este caso, en cambio, uno de estos cruces será el cierre del festival, con Enrico Pieranunzi tocando música de Nino Rota junto a Diego Urcola y Ramiro Flores como integrantes de su grupo.”

En la tercera edición del festival que dirige, Iaies se siente orgulloso de que “más del 75 por ciento de los músicos son argentinos, lo que es lógico, porque demuestra que el jazz en nuestro país es movimiento fuerte, rico y bien vivo. Y uno de los objetivos es, simplemente, darle una visibilidad diferente a lo que sucede todos los días”. En ese sentido, la programación muestra un logrado equilibrio entre figuras internacionales y músicos locales, pero sobre todo una búsqueda de proyectos que excedan los límites del concierto en sí, que provoquen intercambios y que dejen alguna memoria. “Hay un crecimiento de las actividades pedagógicas”, cuenta Iaies. “Los músicos que vienen a tocar, además enseñan. Esa necesidad la percibimos el año pasado, cuando en una clínica de un contrabajista había anotados cuarenta músicos que tocaban ese instrumento.” Entre los grandes músicos extranjeros que llegan para participar del festival se destacan quienes tendrán, hoy a la noche, la responsabilidad de abrirlo: el pianista Frank Carlberg y la cantante Christine Correa, y la Mingus Dynasty, que fundó Sue Mingus luego de la muerte de su marido tomando el nombre de uno de sus discos y, más que un repertorio o determinados arreglos, el espíritu de libertad que había guiado su música. El concierto será a las 20.30 en el Coliseo (M. T. De Alvear 1125) y la Mingus Dynasty, un grupo por el que han pasado músicos como los viejos compañeros de Mingus –Danny Richmond, Jimmy Knepper y George Adams entre ellos–, Chris Potter, Randy Brecker o Steve Turre, llegará en esta ocasión con el notable pianista Dave Kikoski (uno de sus integrantes más antiguos), el trombonista Conrad Herwig y renombrados solistas como el trompetista Alex Sipiagin y el saxofonista Wayne Escoffery.

Uno de los acontecimientos del festival será la presentación de un emprendimiento excepcional, el Real Book argentino. Un ensamble, especialmente armado para esta edición, tocará mañana a las 20.30, en La Trastienda y con entrada libre, repertorio incluido en este proyecto motorizado por el pianista y compositor Esteban Sehinkman, donde se recopila música escrita por compositores inscriptos dentro de las amplísimas fronteras estilísticas del jazz argentino. Este Real Book argentino contiene cientos de partituras, biografías y un disco, disponibles para libre descarga en el si-

tio www.realbookargentina.com. El grupo integrado por Daniel “Pipi” Piazzolla (batería), Mariano Sívori (bajo), Alan Plachta (guitarra), Diego Schissi (piano), Carlos Michelini (saxo tenor-clarón-clarinete), Bernardo Monk (saxo alto y flauta) y Richard Nant (trompeta, flugelhorn y percusión) tocará arreglos de Juan Raffo, Nicolás Sorin, Cirilo Fernández, Alejandro Kauderer, Alan Plachta, Diego Schissi y Sergio Alvarez de temas compuestos por Guillermo Klein, Juan Pablo Compaired, Santiago Vázquez, Diego Mark, Juan Pablo Lazo, Gabriel Cuman y Esteban Sehinkman. Una actuación destacable será la de la orquesta de la pianista Paula Shocrón, que estará el próximo martes 7, a las 21, en la terraza del Centro Cultural Recoleta. Otra presencia importante será la del baterista Barry Altschul, integrante del Cuarteto Circle junto a Chick Corea, Dave Holland y Anthony Braxtos, que dará una clase magistral ese mismo día, a las 14, en Café Vinilo (Gorriti 3780) y actuará hoy a las 22 en Notorious (Callao 966) junto a Ernesto Jodos, Jerónimo Carmona, Rodrigo Domínguez y Sergio Wagner.

Entre los grandes músicos invitados habrá, por otra parte, dos presencias fundamentales, la del pianista Enrico Pieranunzi, uno de los mejores y más personales intérpretes de las últimas décadas, y la del contrabajista francés Renaud García-Fons, un discípulo del virtuoso sirio François Rabbath (que tocó varias veces en Buenos Aires junto a Paco Ibáñez) que toca su instrumento de una manera absolutamente deslumbrante e interpreta una de las músicas más originales del momento. Pieranunzi tocará en trío, junto a Luca Bulgarelli y Mauro Beggio, mañana a las 21, luego del Quinteto de Luis Nacht, en el Teatro 25 de Mayo (Triunvirato 4444); dará un concierto de piano solo el martes 7, a las 17; en la Sala Casacuberta del San Martín actuará en quinteto el día siguiente, a las 21, en el Coliseo. García-Fons, por su parte, dará una clase magistral el lunes 6 a las 15, en el Samsung Studio (Pasaje 5 de julio 444), y más tarde, a las 21, en ese mismo lugar, actuará junto al impactante cuarteto La línea del Sur, que completan el guitarrista Kiko Ruiz, el acordeonista David Venitucci y el percusionista Pascal Rollando. Habrá también algunos destacados músicos de otros países sudamericanos: el saxofonista Mauro Senise –uno de los artífices del sonido de Milton Nascimento en discos como Minas– que actuará en dúo con el pianista Gilson Peranzzetta (el domingo 5 a las 21, en el 25 de Mayo), el uruguayo Hugo Fattoruso (que actuará después de ellos) y el trompetista chileno Sebastián Jordán, que se presentará con su quinteto y también en “cruce” con el trío de Francisco Lo Vuolo.