Todas las piezas que tocan son propias. Sus músicas parten del tango y llegan a géneros afines, y sus letras tienen poco y nada que ver con la tradición, con el sustrato sexista del género. Pueden hablar de un cruel abandono amoroso por chat (“Tu muñequito verde”); de un 0-800 que desespera al que llama (“0-800”), o de un psicoanalista en clave de milonga (“Licenciado”). “Gran parte de nuestro repertorio tiene que ver con lo que llamamos `las nuevas tragedias del siglo XXI`”, ironiza Verónica Bellini, pianista, compositora, fundadora y directora del sexteto que completan Viviana Scarlassa, en voz; Laura Tappata, en guitarra; Cindy Harcha, en bandoneón; Amanda Irarrázabal, en contrabajo y Natalia Robacio, en violín, cuyo nombre (China Cruel) recala en “Contramarca”, viejo tango de Rafael Rossi y Francisco Brancatti. “Pensamos en darle voz a esa china cruel de la que habla este tango tan bien escrito como brutal en su machismo. Nos ponemos del lado de esa china y queremos contar por qué se fue del rancho. Desde allí nace nuestra propuesta”, enmarca Bellini, en las vísperas de una nueva presentación del grupo, esta noche a las 21.30 en el Salón Rossini del Hotel las Naciones (Corrientes 818) que está reemplazando a una Confitería Ideal en pleno trance de refacción edilicia.

“También pensamos en chino, pero con final feliz, cuando hicimos ‘El súper chino’, que habla de una mujer que encuentra el amor en un supermercado”, se ríe la pianista de la agrupación que repetirá el concierto los viernes que le quedan a junio. “Siendo todas mujeres de esta época, queremos contar lo que nos pasa hoy como generación y como género, una temática que está muy presente en nuestro repertorio como muestra el tango ‘Ni una menos’ y muchos otros tangos y milongas que, de distintas maneras, relatan situaciones desde nuestra mirada. En general, nuestras canciones tienen un gran componente de humor e ironía… reflejan situaciones de lo cotidiano”, explica Bellini, cuyo pasado la liga a grupos como Veneno porteño, La Revancha y Las del Abasto, y a la dirección musical del espectáculo “Tango de Burdel, Salón y Calle” con Eleonora Cassano y el Ballet Argentino. Aunque no todo es tango en su vida: China Cruel suele abordar, también, valses, candombes y rancheras. Amplía y explica la compositora: “No olvidemos que Gardel incluía en su repertorio estilos, rancheras y tonadas. Tampoco que el candombe y los valses peruanos formaron parte del repertorio de las orquestas tradicionales. Nosotras tomamos estas expresiones emparentadas con el tango, e incluso jugamos un poco a mezclar tango y cumbia (‘Nací para molestarte’), y lo llamamos cumbionga”, vuelve a sonreír Bellini, que anuncia el sucesor del disco debut -epónimo- publicado en 2013. “Ya está listo… en poco tiempo lo tenemos en la calle”, promete la capitana de un sexteto tanguero y femenino que hace tiempo dejó de ser promesa.