“Remando la historia fue el puntapié para lo que queríamos hacer realmente, que era la composición, este 3 Rojo ya es más natural”, explica Gabriel Bartolomei, una de las firmas recurrentes de la Orquesta Típica La Vidú, que hoy a las 21 presentan su flamante disco en el Club Atlético Fernández Fierro (Sánchez de Bustamante 772). Tras las dos placas anteriores, 3 Rojo profundiza el sonido y el camino artístico del colectivo basado en los temas propios, en una poética contemporánea y en un sonido atravesado por el rock, pero indiscutiblemente tanguero. Como los anteriores, este disco también incluye algún cover, pero no de los clásicos del género. Aquí la firma Solari/Bellinson reaparece para la reinterpretación de “Ropa sucia”, donde participa de invitado el Walter “Chino” Laborde.

En ese camino de temas propios, asoma una poesía que puede entenderse como deudora de la historia reciente, aunque para los integrantes de La Vidú hablan de cosas más atemporales. “Las cosas que pasan ahora pasaron antes y van a seguir pasando, lo que sucede es que nos traspasan en este momento, donde a pesar de que somos jóvenes, ya no lo somos tanto”, reflexiona Bartolomei. “Hay cosas que te pegan de otra manera, que no sé si tiene tanto que ver con el ahora, pero yo trato de aportar algo positivo de de esperanza en lo que escribo”, agrega y señala que pronto se viene un videoclip con el tema que cierra el disco (“Sos vos”, con Ariel Prat como cantor invitado). “Es un personaje que se siente muy perseguido por la sociedad, por la policía, pero eso pasó siempre”, advierte el compositor. Facundo Radice -una de las voces más destacadas de la nueva escena- recuerda la vigencia de algunos tangos centenarios y el primer bandoneón de la orquesta, Gabriel Annoni, entiende que los músicos son “gente involucrada políticamente por el simple hecho de que todo es política”. Así, la música deviene también en una parte del camino para “hacer una sociedad mejor”. Bartolomei agrega la poética en su rol como letrista.

“Nunca me sentí poeta ni creí que pudiera escribir canciones”, reconoce. La primera la compuso “por una necesidad expresiva”. “Mi apuesta es tirar una onda para hacer una sociedad mejor”, promete. De los discos anteriores a este, las letras de sus canciones han ganado claridad. “Volvemos a la naturalidad -interviene el cantor-, capaz la primera te cuesta más, pero con los años evolucionás y todo lo que va viniendo después sale más seguro”.

“La orquesta ya se identifica por los temas propios, porque no hace clásicos, y la gente que nos viene a ver lo sabe, pero costó, ¿eh?”, comenta Bartolomei. Su tocayo Annoni, primer bandoneonista de la agrupación destaca la conformación progresiva de un sonido identificable. “Hay un color que es el de La Vidú, que no sé si es el rojo”, bromea para las risas de sus amigos. En ese color musical, el rock resulta fundacional. “Nos es tan natural como el tango”, asegura Annoni, aunque reconoce que la influencia se manifiesta de un modo distinto al que sucede en otras orquestas contemporáneas. Bartolomei afirma que “sale así porque somos así en nuestro estilo de vida y eso se traslada a la música que amamos”. Radice especula con que el aire rockero proviene de no atarse a los clásicos. “Somos bien tangueros, pero por ahí esa fuerza viene de no estar presente lo anterior, que nos merece el mayor respeto y nos rompe tener que aclararlo porque amamos esa época, pero nos proponemos ser como somos”.

Para la presentación de hoy, los músicos prometen repasar el disco nuevo con todos sus invitados, tener un apartado “con mucho audiovisual” y pisar el acelerador con todos los “hits” de la orquesta. Al final, Bartolomei se permite una reflexión sobre el vals -ese subgénero tan pasado por alto en la actualidad- de la nueva placa, “Sueño de ayer”: “me gusta que tenga definida la forma de vals, que no haya que hacer esfuerzos para notarlo, porque eso confirma nuestra raíz tanguera”.