A contrapelo de la idea que pudo generarse aquí, más por decisiones en la programación que por verdaderos juicios de calidad de productores y de públicos, de que cualquier músico de reggae salido de Jamaica merece actuar en un gran escenario, es parte de una gran tradición o supone un gran interés histórico, el documental Rise Up se basa en las pequeñeces y su capacidad de expansión. O, dicho de un modo más dulce, en la música del underground de la isla americana, encarnada en tres casos testigo: el del músico del ghetto y salvaje letrista Turbulence, el de la celestial Kemoy, una joven cantante de la zona rural de Kingston, y el de Ice Anastasia, un exponente de la zona residencial de esa capital. No deja de ser ajustado que este poético documental publicado en formato DVD en el país retrate “la celebración por la lucha y la superación humana”, lo cual es todo un mensaje programático del reggae. La obra incluye música de Lee Perry, Sly & Robbie y Alpha Blondie y se consigue junto a un CD con 25 canciones del under jamaiquino reciente, redondeando 160 minutos de pequeños reggaes.