La campaña iniciada por un colectivo de particulares el lunes pasado lleva por nombre Reabran la Lugones. El puntapié inicial lo dio la nota publicada el domingo 10 en Página/12, donde se daba cuenta del estado de las obras anunciadas para llevarse a cabo no sólo en esa sala, sino en la totalidad del legendario edificio de Corrientes al 1500. En noviembre de 2013, el ministro de Cultura de la Ciudad, ingeniero Hernán Lombardi, anunció un plan general de obras de refacción para el teatro, que se iniciarían en la sala Leopoldo Lugones, ubicada en el último piso del edificio. Eso debía ocurrir en marzo pasado, quedando finalizadas las obras en julio. Tras un mes de la fecha pautada para la finalización de la obra, ésta no sólo no empezó, sino que en todo este tiempo la sala se mantuvo desmantelada.

En la nota de Página/12, el ingeniero Sergio Levit, vocero del Ministerio de Desarrollo Urbano de la Ciudad, reconoce que no hay en este momento una empresa asignada para llevar adelante la obra y que es difícil que la sala Lugones –sitio clave en la difusión de cine alternativo y de calidad en la ciudad de Buenos Aires, desde 1967 en adelante– esté en condiciones de reabrir en lo que resta del año. Ante esta situación, un grupo de particulares, integrado por críticos, cineastas, artistas, abogados, programadores de festivales, representantes de la cultura, asistentes regulares a la sala y vecinos de la ciudad, abrió una página que lleva por nombre Reabran la Lugones (https://www.facebook.com/ReabranLaLugones/posts/695213240572271).

Allí figura un escrito que se entregará a la brevedad ante las autoridades pertinentes, en el que se les exigirá presentar un informe concreto al conjunto de la ciudadanía, sobre el estado de las obras y previsión de finalización. La idea es que lleve la mayor cantidad de firmas posible. Entre esa página y otra que se abrió en el sitio Change.org (http://www.change.org/es/peti ciones/sr-ministro-de-cultura-de-la-ciudad-autónoma-de-buenos-aires-lic-hernán-lombardi-re abran-la-lugones) se llevan juntadas cerca de mil doscientas firmas en tres días, lo cual da una idea de la magnitud de la respuesta.