8-LOS TIEMPOS CAMBIAN

de André Téchiné. Con Gérard Depardieu y Catherine Deneuve.

2004, 98 min. Transeuropa.

El regreso de André Téchiné a la cartelera porteña (la película se estrenó en cines a comienzos de año, lamentablemente en proyección DVD) muestra al director de Apasionados y Toda una mujer en su mejor forma. Modelo de relato coral, en una hora y media Téchiné cuenta más, mejor y más intenso, sobre media docena de personajes, que el mexicano González Iñárritu en el doble de tiempo. En el centro de una compleja red familiar y amorosa –que tiene a la insatisfacción, la distancia y la sensación de estar fuera de lugar como factores en común–, el personaje de Depardieu vuelve a traer una emoción que tanto el mundo como el cine habían olvidado hace rato: el amor loco. Ese que todo lo subvierte.

6-USA VS. JOHN LENNON

de David Leaf y John Scheinfeld.

2006, 96 min. Gativideo.

Estrenado en cines poco tiempo atrás, el monitor de televisión parece un formato más adecuado que la pantalla grande para este documental que no se aparta un paso de lo tradicional. El tema es la vigilancia a la que el FBI sometió a John Lennon allá por fines de los ‘60/comienzos de los ’70, cuando dos novedades tuvieron lugar en la carrera del nativo de Liverpool: su mudanza a Nueva York y el afloramiento de su conciencia política. La clásica ecuación material de archivo + entrevistas a cámara permite revisitar las luchas de la época, recordar las famosas bed ins del matrimonio Lennon-Ono y escuchar a verdaderas bestias negras de la época como Gordon Liddy, cerebro de Nixon.

7-¿QUE DIABLOS ES EL SEXO?

de Jean-Julien Chervier y Agnès Obadia. Con Julie Durand y Alexis Roucout.

2000, 85 min. SBP.

La necesaria combinación de ingenuidad y desfachatez exhibe esta película dirigida à deux, una de las que integran la colección 2º Tour del Cine Francés. Dos chicas y dos chicos, todos ellos con las hormonas revolucionadas, son los protagonistas. Dividida en mitades, la primera de ellas, protagonizada por las chicas, es –como suele suceder– la más fresca y encantadora. A cargo de un personaje que lleva el irresistible nombre de Roudoudou, se luce la debutante Julie Durand, capaz de toquetearle la piernita a un pasajero en el tren, o de tirársele encima al chico que entra a terapia cuando ella sale. Otro punto alto es el intento de levante de los dos chicos a sus respectivas madres (cruzadas, se entiende).

6-INOCENCIA SINIESTRA

de Narciso Ibáñez Serrador. Con Nieve de Medina, Montse Mostaza y A. Lorenzo. 2006, 70 min. SBP.

Una de las entregas de la serie televisiva Películas para no dormir, Inocencia siniestra (el título original es más sencillo: La culpa) representa el regreso a la dirección de Chicho Ibáñez Serrador, que allá por los ‘60/’70 había llamado la atención con esos miniclásicos del terror-paella que son La residencia y ¿Quién puede matar a un niño?. Lejos de la perfección (tiene más cabos sueltos que la embarcación de un manco, y su premisa antiabortista parece ideada por un miembro del Opus Dei), Inocencia siniestra es modelo de una forma de thriller, que ya no se practica, en la que la construcción del relato, clima y personajes importa más que el efecto, el golpe bajo o los excesos gore.