Andreas Huyssen abre los ojos y repite cuatro veces “beautiful”, como si estuviera hipnotizado por el sonido del título en español, cuando se le pregunta por La cinta blanca, el film del austríaco Michael Haneke. “En varios artículos publicados en Estados Unidos se planteó que la película mostraba el germen del nazismo, pero me parece que es una lectura simplista y refutable, si consideramos que en otros países, no necesariamente protestantes, en la vida en pequeños ámbitos rurales, aun en Francia o Inglaterra, reaparecen dimensiones ligadas a la represión religiosa”, dice el crítico alemán. “Los ejemplos de ‘niños malvados’ es muy realista –aclara con una sonrisa–, pero asociar el argumento de la película con los orígenes del nazismo no me parece correcto. No hay una relación directa entre esa represión cultural y el nazismo.”