Gente de una excitación desbordante que fuerza el movimiento de las patitas de su gato siamés al ritmo del que te clavo, que te clavo la sombrilla, o fabrica esmeradamente un títere de vaca bailarina para acompañar el hitazo del verano. Los usuarios del sitio Youtube hacen alarde de creatividad para versionar la coreografía del aviso: hay un show personal de El Tero (gato de extraño talento dancístico), un llamado robot no poder parar que aplica la coreo a un gigante de hojalata y un grupo de amigos que a falta de sombrilla aplican los versos a un cepillo. Barras y familias numerosas producen la mímica, la sincronía y el playback exacto con prolijidad en más de 200 videos que también incluyen: un grupo familiar en una quinta, entrecruzándose y armando duplas intercambiables en notoria referencia swinger, una barra de varones con remeras atadas a la altura del ombligo cuya máxima innovación es abrir la sombrilla al final de la canción (en recreación libre del aviso), un “pibe junto al ropero” que reemplaza la sombrilla por perchas, espadas de juguete y raquetas de tenis demostrando el carácter secundario del juguete sexual cuando la imaginación alcanza.