Ariela Kreimer tiene 33 años y Fiesta (Crecer creando), su primera novela publicada, fue finalista del Premio de Literatura Infantil “El barco de vapor 2005”. Kreimer, egresada de la carrera de letras de la UBA, cuenta que la novela está ambientada en el colegio donde cursó la secundaria, el Raggio, y muchos de los personajes están inspirados en algunos de sus compañeros. La historia de cuatro amigas, Victoria, Abril, Mailén y Norma, funciona por contrastes. Porque en la fiesta de quince que las convoca –la de Victoria–, pero también en la previa, en los preparativos, la autora revela con crudeza el abismo social que hay entre Norma (hija de una empleada doméstica) y sus compañeras. “Me parece que la gente que pone mucha energía en una fiesta es porque tiene una necesidad muy grande de protagonismo, que existe tanto en las chicas de 15 como en las mujeres de 30”, sugiere la autora, que tiene una novela inédita, La victoria de Sapotracia, y cuentos publicados en diversas antologías.

–¿Fiesta puede ser interpretada como una reivindicación de la escuela pública, en tanto espacio donde convive la hija de un empresario y de la empleada doméstica?

–Sí, es cierto, estoy orgullosa de haber ido a una escuela y a la universidad pública y siempre las reivindico. Estoy profundamente agradecida y es algo que no se valora mucho. Creo que los profesionales formados en la universidad pública estamos en deuda con el país, porque tenemos una responsabilidad social por lo que recibimos.