Hay un tema emblemático con el que Cacho Castaña describe y homenajea a su amiga Adriana Varela, y es “La gata Varela”. Entre los dos reconstruyen la forma en que nació, tres años atrás: “Cacho me llama por teléfono un sábado a la noche, y me dice: ¿Te puedo componer un tango? Es más, ya te lo compuse. Es más, te lo voy a cantar a capella. Cuando me lo canta por teléfono, casi me muero. Era redondo, una radiografía extraordinaria”, recuerda Varela. “El astrólogo que me marcó que yo tenía que cantar, un tipo súper capo que le hace cartas a gente importantísima, se asombró: ‘La vio como no la vi yo’, me dijo.” Castaña completa la anécdota: “La volví a llamar para pasarle la letra exacta, y no estaba. Me atendió el hijo y le dije: ‘Bueno, nene, agarrá el lápiz’. Pero mientras iba dictando la letra, me daba cuenta de que le estaba hablando al hijo... ¡Cómo le voy a decir que la madre parece una atorranta cuando canta, que parece que se deja y no se deja! Ya estaba llegando a esa parte y le avisé: ‘Mirá nene, esto es una metáfora’. El pibe se cagó de risa. ¡Qué iba a ser una metáfora!”.

–¿Y le quedó material para hacer otro tema?

–See... ¡Con ella se puede hacer una enciclopedia! También podría hacer “La gata Varela 2”: “Se dejó, se dejó, se dejó... ¡Era tan atorranta como yo pensaba!” (se ríen los dos).

–A usted también le escribió alguien una canción, Andrés Calamaro. ¿Cómo surgió esa letra?

–Me llamó por teléfono un día porque vio que había hablado bien de él en un reportaje. Me dijo: ‘Che, loco, tenemos que ser amigos, ¿qué tenés que hacer ahora?’. Nada, vení para mi casa. Se vino a las 6 de la tarde y se fue a las 12 del mediodía del otro día. Nos hicimos muy amigos y después me mandó el tema.

La letra de Andrés Calamaro dice, entre otras cosas: “A Cacho Castaña... ¡Romántico varón, de los que ya no se hacen! ¡Compañero del Polaco Goyeneche y playboy legendario! Seré breve: Que aguante el bobo de Cacho Castaña / Me extrañaría... Si se va sin despedirse. / Y una gran preocupación me inunda el pecho, / ¡porque Cacho hay uno solo en la Argentina! Ninguno tan ganador... Y las mujeres... ¡qué campaña! Todo es cierto, ¡quiero ser como Castaña!”. La letra finaliza con una advertencia para Cacho: “La música, la pone usted”.