Johansen ya tiene dos discos nuevos en carpeta. El próximo se llamará Jogo y el siguiente Fogo. “Es una tríada”, dice.

–Antes decía que los temas que quedaron afuera de un disco y están buenos tienen su oportunidad en el siguiente. ¿Se puede decir que Jogo va a estar más o menos bueno y Fogo va a ser directamente un desastre?

–No, no, para nada. Jogo va a ser un disco inesperado. Y Fogo va a ser un disco más rockero, de quemazón. Pero no quiero adelantarme porque me gusta la sorpresa. Además, quiero darle espacio a Logo, que recién estamos arrancando con los videos. Pero sí, la tríada fue una idea que me atrajo. Tampoco quiero caer en el disco quíntuple estilo El Salmón.

–¿Tenía pensado hacer tres discos desde un principio?

–Se fue dando porque nos entramos a engolosinar en el estudio y terminamos grabando cincuenta temas. Y el chiste con Sony fue: “Okey, ya están los tres discos del contrato”. En verdad, creo que van a seguir apareciendo los riesgos por todos lados. La frase de cabecera que suelo decirme es una de Kurosawa: “El verdadero artista no desvía la vista”. Y eso es un desafío, porque uno sale a la calle y trata de desviar la vista a cada rato para no ver las cosas que pasan. Por eso, trato de verlo todo, lo que me gusta y lo que me disgusta. Y esas cosas estarán también en los próximos discos. Estoy muy convencido de jugármela porque, en verdad, no tengo nada para perder.