El primer pozo argentino
La historia del primer pozo petrolero argentino es el reverso de la forma en que se encontró el agua del acuífero de Libia. En 1907, el técnico José Fuchs, enviado de Alemania para buscar agua, encontró petróleo a más de 500 metros de profundidad. En su media lengua intentó explicar la importancia del descubrimiento a los desilusionados habitantes del pueblo, que veían con desprecio el líquido negro. Finalmente aceptaron que había motivos para festejar y enviaron a los técnicos dos barriles de vino para la celebración.